Aguzar él hierro significa afilar algo, pulirlo, dejarlo listo, y eso es también uno de los objetivos de la familia, prepararnos para enfrentar la vida, para las diferentes situaciones y circunstancias que enfrentaremos como también para los distintos tipos de personas con las con las que nos relacionamos en la vida. PROVERBIOS 27-17
Muchas veces nos confundimos pensando que alguien con carácter son aquellas personas que son explosivas y prepotentes, pero no es así, una persona con carácter es alguien que puede controlarse internamente y que tiene la capacidad para responder con asertividad, que puede dar su opinión de una manera clara y directa, pero sin ofender ni humillar.
Definamos que es la ASERTIVIDAD: Es la habilidad de expresar nuestras opiniones y deseos de una manera amable, franca, abierta, directa y adecuada, logrando decir lo que queremos sin ofender ni dañar a los demás.
Verdaderamente ser asertivo para hablar es una de las cualidades de las personas que tienen carácter, y esa es una de las habilidades para la vida que deberíamos de aprender en casa con nuestra familia.
¿Qué necesitamos enseñar para forjar el carácter en nuestra familia?
ENSEÑARLES A DECIR NO CON FIRMEZA Y SIN TEMOR (1 CORINTIOS 16:12)
Seguramente a muchos de nosotros pensaríamos que Apolos debería de haber aceptado la petición del apóstol Pablo para ir a la iglesia de Corinto, quizás como muchos decimos “Por compromiso” o por “Cortesía” pero el apóstol Pablo dice que Apolos de ninguna manera tuvo voluntad de ir, es decir que Apolos dijo que no y se mantuvo firme.
No podemos saber si Apolos tenía razón en no querer ir, ni tampoco si Pablo tenía razón en presionarlo, pero lo que sí podemos ver es el carácter de Apolos en la firmeza que tenía de decir un NO aun a pesar de ser presionado a hacer algo.
Igualmente podemos ver la madurez del apóstol Pablo para aceptar ese no sin criticarlo públicamente, pues solamente dijo: irá cuando tenga oportunidad.
Lastimosamente eso es lo que nosotros no podemos hacer o nos cuesta mucho, decir NO, pues muchas veces nos comprometemos o aceptamos hacer cosas que no queremos hacer simplemente por el temor a quedar mal, por el temor a ser criticado.
Pero tenemos que saber que decir NO es un derecho que todos tenemos, de hecho al único a quien nunca debemos decirle que no es a nuestro Dios.
Para decir NO se necesita ser asertivo y también sabios para comprender algunas cosas muy importantes:
No podemos ni debemos tratar de complacer a todos, pues al final nos sentiremos infelices y amargados.
Es mejor decir un NO sincero que vivir mintiendo inventando excusas.
Hay algunas personas que en realidad no necesitan ayuda, sino que son irresponsables y manipuladoras y quieren aprovecharse de la buena voluntad.
ENSEÑARLES A MANEJAR SABIAMENTE LAS CRÍTICAS (COLOSENSES 4:6)
La realidad es que a todos nos agrada que las personas nos den una palabra de aliento y motivación, nos gusta que las personas aprueben lo que hacemos. Pero tenemos que comprender que hay algo inevitable: LAS CRÍTICAS. Es por eso que es muy importante que aprendamos a manejarla, y que no nos afecte nuestra motivación ni nuestra autoestima.
¿Qué es una Crítica? Es un juicio u opinión personal que se expresa sobre alguien, o sobre lo que hace. La cual puede expresarse de manera positiva o constructiva, o de una manera negativa o destructiva.
Ya que no podemos evitar ser criticados tenemos que estar preparados para poder manejar la crítica sabiamente para responder a ella e una manera sabia, y que pueda llegar a ser beneficiosa para nuestra vida. Tenemos que saber que si lo que hacemos está mal o no lo estamos haciendo bien, seremos criticados y señalados, pero aun si lo estamos haciendo bien o excelente también seremos criticados (Eclesiastés 4:4)
¿Cómo podemos manejar la crítica de una manera sabia?
No tomar todas las críticas como ataques, sino comprendiendo que hay personas que tienen más conocimiento y experiencia que nosotros y quieren ayudarnos a mejorar (Salmo 141:5)
Si la crítica es negativa y dañina, debemos comportarnos como verdaderos cristianos no pagando mal por mal (Romanos 12:17) y orar por aquellos que nos han criticado de esa forma (Mateo 5:44-45)
Debemos tener la sinceridad y la valentía, pues eso es tener carácter, para reconocer, aunque nos duela, aquellas cosas que sí son verdad y que fue señalada en la crítica que nos hicieron (Proverbios 15:31-32) y luego de aceptarlas mejorarlas en nuestra vida.
ENSEÑARLES A EXPRESAR SU DESACUERDO CON SABIDURÍA (PROVERBIOS 26:4-5)
Tenemos que saber que no siempre estaremos de acuerdo con las opiniones o las acciones de una persona, muchas veces estaremos en desacuerdo, y tenemos que aprender a tener el carácter para expresar ese desacuerdo, aun a pesar de los conflictos que eso pueda causar.
Lastimosamente muchos necios hoy en día se creen sabios porque no nos atrevemos a hacer lo que la palabra de Dios nos dice que hagamos, es decir responder al necio no de acuerdo con su necedad sino como merece su necedad, es decir no darle la razón.
Seguramente en muchos ámbitos de la vida nos ha tocado escuchar y soportar muchas necedades, y por no tener conflictos no expresamos nuestro desacuerdo o nuestra desaprobación, sino que, tomamos el camino más fácil y más cómodo de no confrontar a nadie.
Muchas veces hemos dicho, “tienes razón”, cuando en realidad lo que teníamos que haber dicho con valentía y en el nombre del Señor era: estás equivocado, no está bien lo que haces o piensas hacer.
CONCLUSIÓN: Hemos visto porque es tan importante tomarnos el tiempo de forjar el carácter de nuestra familia, es una preparación para la vida, y si no lo hemos hecho, nunca es tarde para comenzar, hagámoslo desde hoy con la ayuda y la sabiduría de nuestro Dios.