Conozco gente honrada que trabaja duro “de sol a sol” pero que nunca ganan más que lo suficiente para sobrevivir (los cristianos no son la excepción). ¿La clave para ganar más dinero? ¡HAZTE MÁS VALIOSO! La gente valiosa “vale más” (hablo en términos de mercado pues entiendo que “todos somos valiosos como hijos de Dios; mi post va por la línea de los negocios). Aclarado eso, ¿cómo me hago más valioso ‘comercialmente’ hablando?
1º BUSCA A DIOS CON GANAS. Hazlo como si de eso dependiera tu éxito financiero (en parte así es). Los hijos de Dios tenemos un recurso valiosísimo que usamos poco, “nuestra comunión con el Padre”, fuente de toda bendición. Seamos como los árboles, ellos saben que para prosperar deben enraizarse cerca del agua, así mismo debiéramos hacer nosotros…, ¡buscar la fuente universal de vida abundante, Dios!
2º TRABAJA MÁS EN TI MISMO QUE EN TU TRABAJO. Al trabajar en tu empleo te ganarás la vida, pero al trabajar en ti mismo harás una fortuna. Te lo explicaré: Adquiere nuevas habilidades, pule las destrezas que ya tienes, mejora tu carácter, sé disciplinado, sé relacional, estudia, capacítate, vuelve a la Universidad, haz ejercicio, lee más, elimina los hábitos negativos de tu vida y estimula nuevos y mejores hábitos, busca mejorarte en todos los sentidos…, vuélvete más atractivo. Las personas atractivas (integralmente) son escasas y por tanto más caras ––comercialmente hablando––.
3º PON EN PRÁCTICA LAS NUEVAS HABILIDADES ADQUIRIDAS Y ATRAVIESA LAS PUERTAS QUE DIOS TE IRÁ ABRIENDO. Es imposible que a una persona que busca a Dios “de verdad y no a medias” y que además “ha comenzado a mejorar personal y profesionalmente” no se le abran puertas de ascensos, oportunidades de negocios, ideas creativas, sociedades de negocios suculentas, promociones; el problema es que muchas veces no vemos las puertas y pasamos de largo. La vida nos pone puertas de trabajo, oportunidades y conexiones, es nuestro deber atravesarlas.
4º ¡VALORÍZATE! Todos los consejos anteriores están muy buenos (y son efectivos) pero hasta que no creas en ti mismo, en tus capacidades, en tu experiencia, en lo mucho que vales de nada servirá. Tienes que aprender a valorar “lo que eres y lo que sabes”; de hecho en ocasiones tendrás que sacarlo a relucir (no confundas humildad con ‘demasiada humildad’) porque habrán personas que querrán abusar de ti: No te pagarán lo que mereces, encontrarán que en realidad no eres muy bueno, siempre pedirán rebajas por tu trabajo, denostarán tu labor. ¿Qué hacer? Párate firme y diles lo que vales ––aunque también demuéstraselos con hechos––, y luego si la cosa no cambia márchate, la vida suele premiar eso que se llama “dignidad”.
5º SÉ CREATIVO. “La necesidad, dijo alguien, es la madre de la creatividad”…, ¡cierto es! Compartimos con el Padre la bendita capacidad de crear. Así entonces forjar nuestro propio destino no es una opción, es la clave si deseamos mejorar nuestras finanzas. Para esto tendrás que entrenar tu centro de creatividad en tu cerebro (llamado también imaginación), al hacerlo ideas novedosas vendrán, proyectos, sueños y toda clase de ocurrencias que bien podrían hacer de ti un inventor prodigiosos, un escritor talentoso, un emprendedor apasionado o un simple, pero no menos importante, “creador de sueños”. Por eso debes entender lo siguiente: “Las mentes creativas nunca quedan cesantes”. ¡Ponte a pensar! quizá radica en ti un genio creativo que al mundo asombrará.
6º AGREGA VALOR A LOS DEMÁS. Que nuestras acciones procuren el bien del otro, que le sean útiles y valiosas, que le sumen, que le lleven a su siguiente nivel, con la motivación correcta de servir, la que nace del corazón, aquella motivación que se desprende del principio “El que siembra cosecha”. Las empresas más grandes se hicieron pensando no en hacer dinero sino en dar soluciones y agregar valor a las personas, por eso el consumidor las premia.
CONCLUSIÓN:
Hay gente que gana 4 dólares la hora, otros ganan 100. ¿Por qué? Hipótesis hay muchas: corrupción, injusticia, desigualdad, nepotismo, y todo eso es parte de la realidad pero no del todo, pero cuando TE HACES MÁS VALIOSO (seas un artesano, un profesional o incluso un ministro), la vida se encargará de “pagarte más”. Bien lo dijo el Maestro de maestros: “AL QUE TIENE MÁS ––el que vale más, el que ha crecido, el que se ha desarrollado––, SE LE DARÁ MÁS. PERO AL QUE TIENE POCO, AÚN ESO SE LE QUITARÁ” (Marcos 4:25).
- Deja de maldecir tu suerte, haz los cambios internos, seguramente la vida te impulsará a nuevos y mejores puertos porque hay un Dios que conspira a favor de quienes se atreven a ser osados en el anhelo de ver crecer sus finanzas.
No pido que entiendas este post ni que estés de acuerdo conmigo, pero si algo hizo clic en tu interior es porque este escrito era para ti.
by Gabriel Gil ®️
P.D. Les diré porque (modestia aparte), cobro más que el resto, en respuesta a algunos que han cuestionado mis “tarifas elevadas” o incluso el porqué cobro ya que “por gracia recibí, entonces por gracia debo dar”:
- Soy asesor espiritual del ministerio internacional CBMC (Hombres de negocios cristianos); Asesor para R.E.Y.E.S. (red de empresarios y emprendedores de servicio de la IDD); Teólogo de profesión; Certificado como Coach-mentor (he mentoreado personas de varias partes del mundo); Escritor de varios libros, Profesor de Biblia, Liderazgo y Maestro de Habilidades para la Vida; además soy conferencista internacional tanto para empresas como para entidades eclesiales…, ¡soy muy bueno en lo que hago! Pero no nací siendo todo esto, ¡tuve que pagar el precio! (y aún estoy haciéndolo), ¿capiche?
