«Mientras viva, mientras Dios me dé aliento, mis labios no pronunciarán maldad y mi lengua no hablará mentiras.» Job 27:3-4 (NTV)
A pesar de las tribulaciones, Job se mantuvo firme en su deseo de caminar en rectitud delante de Dios, de ser fiel a pesar del dolor, de su confusión, de no entender lo que pasaba. Aunque en ocasiones dudó de la bondad y justicia divina, con todo, no se alejó del Señor, le buscaba para tratar de entender su situación, para exponer su caso y sus razones.
Al igual que Job, nuestra actitud frente a las pruebas debe ser acercarnos más al Señor y querer permanecer firmes en Él, asirnos de Sus promesas y no alejarnos. ¡Son las tribulaciones las que prueban nuestra fe! Es fácil permanecer firme cuando todo está bien, pero ¿qué pasará cuando soplen vientos fuertes?
Oración
Señor, necesito Tu gracia y del Espíritu Santo para pasar cada prueba y mantenerme firme en Ti. Que nada ni nadie me separe de Tu amor, por el contrario, que de cada prueba salga afinado, aprobado y más dependiente de Ti. ¡Amén!