¿Están ustedes dispuestos a obedecer? ¡Comerán lo bueno de la tierra! Isaías 1:19
Rendirse a Dios significa reconocer que sin Él no podemos nada (Juan 15:5) y que necesitamos Su ayuda en todo. Implica reconocer que Dios tiene el control dé nuestra vida, y que sus caminos son más altos que los nuestros (Isaías 55:9), por lo cual podemos confiar en Su guía, aunque no siempre entendamos. Aun Jesús dijo en Getsemaní: “Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.” Lucas 22:42). No es perder, sino ganar en el Reino de Dios. Es el camino a la paz, al propósito, y a una vida plena en Él.
Escuchó al Señor decir:
“Estoy buscando a aquellos que están rendidos a Mí—los que responden a Mi voz, aun cuando las instrucciones son desafiantes. Estoy llamando a vasos santificados, apartados para el uso del Maestro. El enemigo intentará crear nubes de confusión, condenación y tormentas en tu mente. Pero Mi voz se eleva por encima de todas las demás voces—incluyendo las tormentas en tu interior. Permanece quieto en Mi presencia y escucha Mis instrucciones para la próxima temporada. Te estoy dando claridad, dice el Espíritu de Dios. Estoy liberando instrucciones claras. Estoy despejando tu camino. Estoy refinando tus alineamientos y haciendo que aquellos que no están ordenados para estar en tu vida salgan, dice el Espíritu de Dios.”
“Estoy buscando un pueblo rendido y entregado a Mí. Estoy buscando personas a quienes pueda confiar las hazañas. Otorgará favor exponencial y un derramamiento de Mi gloria sobre los vasos rendidos. Sacudirán territorios y regiones. Serán portadores de las llamas de Mi presencia. Verán el mover de Mi Espíritu como nunca antes. La voz del miedo está intentando apoderarse del corazón de las personas en esta hora—y los hará retroceder de los lugares y espacios que he ordenado. Pero estoy levantando a un pueblo con una fe audaz, que se mantendrá firme en medio de las tormentas, calamidades y crisis. Ellos se mantendrán con valentía y fervor sobre lo que les he dicho en el lugar secreto. Son guerreros del lugar secreto que han escuchado Mi voz y saben hacia dónde ir, dice el Espíritu de Dios.”
“Así que te digo: Permanece firme y no cedas ante la voz del enemigo. Resiste el espíritu de temor que intenta cubrir la tierra. Escucha atentamente Mis instrucciones y obedéceme, y Me manifestaré entre ustedes con gran gloria, favor y poder sanador. ¡Prepárate para los milagros y las hazañas más grandes que jamás has visto!, dice el Señor. Prepárate para un mover mayor de Mi Espíritu en la Tierra. Prepárate para movimientos de sacudimiento y despertar. Prepárate para movimientos de avivamiento,” dice el Espíritu de Dios. No he terminado con las naciones del mundo, pero me estoy preparando para liberar una cosecha masiva, dice el Espíritu de Dios. Y estoy refinando mis instrumentos y vasos en esta hora. Así que no te muevas por temor, sino muévete por Mi gracia y permanece rendido a Mí. Este es el tiempo de los rendidos,” dice el Señor. (Una palabra de Ryan LeStrange)
Oremos:
Padre amado, aquí estoy. Hoy rindo todo delante de Ti. Mis planes, mis sueños, mis miedos y mi voluntad—los coloco a tus pies. Hazme un vaso útil para tu gloria. Quiero escucharte, obedecerte y caminar solo por tu voz, aunque no entienda el camino. Refina mi corazón. Quita lo que no proviene de Ti. Alinéame con tu propósito eterno. No quiero moverme por temor, sino por fe. Dame claridad, dirección y fuerza para permanecer firme. Derrama sobre mí tu favor, tu gloria y tu Espíritu. Haz de mí una llama encendida que sacude territorios. Soy tuya, completamente tuyo, Señor. Esta es la hora de los rendidos… y yo digo: ¡Aquí estoy! Heme aquí, envíame a mí. En el nombre de Jesús, amén.
Con amor y oraciones,
