Que el Dios de la esperanza los llene de toda alegría y paz a ustedes que creen en él, para que rebosen de esperanza por el poder del Espíritu Santo. Romanos 15:13
El enemigo ha tratado de descarrilarnos a través de cualquier medio, a través de personas, a través de las circunstancias y ha estado acechando a nuestro alrededor “esperando el momento” de robarse nuestra alegría, nuestra paz y el destino que Dios tiene para nosotros. Dios nos está dando la victoria en medio de una feroz oposición. Él nos está guiando desde el valle de las lágrimas, las luchas, la derrota, la decepción, la enfermedad, la tragedia, la pérdida y la limitación hacia el valle de la bendición, la abundancia, el cumplimiento y el descanso.
Salmos 84:5-7 ¡Cuán felices son los que hallan fuerzas en ti, los que ponen su corazón en tus caminos! Cuando cruzan por el valle de las lágrimas, cambian su aridez en un manantial al llenar la lluvia los estanques. Van de victoria en victoria, hasta llegar a verte, oh, Dios, en Sión.
YO ESTOY CONTIGO
¿Las cosas se ven oscuras en tu vida hoy? Si es así, el Señor me reveló una palabra de ánimo para compartir con ustedes hoy. Esto es lo que escuché decir al Espíritu del Señor:
“No siempre me sientes, y no siempre entiendes por qué todavía no he respondido a tus oraciones en algunas áreas. Pero Yo sé por qué no te he respondido. Yo sé por qué te he pedido que esperes. Lo más importante que debes saber es que YO ESTOY CONTIGO. Estoy contigo en tus lágrimas. Yo estaba contigo cuando colapsaste en el piso y no quisiste levantarte. Yo estaba contigo cuando te escondiste detrás de una puerta cerrada esta mañana, ayer, y anteayer. Yo sé que las cosas por las que estás pasando son realmente difíciles para ti en este momento. ¡Pero anímate! Yo estoy contigo, y el solo hecho de que Yo estoy aquí debería tranquilizarte. Nunca te dejaré ni te abandonaré. Yo soy toda la fuerza que necesitas, en el momento en que la necesitas. Mira hacia atrás hoy: ¡No pensaste que lo lograrías, incluso hoy! Sin embargo, aquí estás, porque Yo estoy contigo”.
Isaías 41:10 No tengas miedo, que yo estoy contigo; no te desanimes, que yo soy tu Dios. Yo soy quien te da fuerzas, y siempre te ayudaré; siempre te sostendré con mi justiciera mano derecha.
“Yo tengo un propósito para ti, mayor de lo que puedas imaginar. Es por eso que estoy cerrando algunas puertas para que puedas abrir otras. Por eso también te estoy abriendo puertas que NUNCA, nunca, nunca habrías podido abrir por ti mismo. Yo traeré multiplicación, una multiplicación que no puedes ni imaginar. Yo no he olvidado tus semillas, no he olvidado tus lágrimas, no he olvidado y nunca olvidaré la cosecha que te debo, porque te has aferrado a Mi Palabra y sembrado con lágrimas, pero cosecharás con alegría. Los que siembran con lágrimas sin duda volverán con alegría, trayendo consigo sus gavillas. Es posible que la cosecha no venga de la manera esperada. Ciertamente, no llegará tan pronto como lo pensaste originalmente, porque ya ha pasado la fecha en que sentiste que llegaría; Pero tus tiempos están en Mis manos. Yo Soy el mismo todos los días y te estoy cuidando mientras esperas”.
Salmos 126:5-6 Los que siembran con lágrimas, segarán con gritos de júbilo. El que con lágrimas anda, llevando la semilla de la siembra, en verdad volverá con gritos de alegría, trayendo sus gavillas.
“Calma tu corazón errante y adolorido. Aférrate a mí. Tranquilízate y descansa como lo hace un niño sobre su madre. Deja que Mi gracia sea suficiente para ti, porque mi poder se perfecciona en tu debilidad. Veo que sientes que no puedes continuar, pero Mis misericordias son nuevas todos los días. Por la mañana, te despertarás y será un nuevo día.
Mañana será un día de victoria, de valentía, de gracia para caminar por la ciudad una vez más. Será un nuevo día de riqueza en tu alma. Será un día en el que te concederé revelación sobre muchas de las cosas que te conciernen”.
Salmos 42:5 ¿Por qué te desanimas, alma mía? ¿Por qué te inquietas dentro de mí? Espera en Dios, porque aún debo alabarlo. ¡Él es mi Dios! ¡Él es mi salvador!
“Antes de irte a dormir esta noche, pídeme revelación sobre las cosas que te preocupan. Déjame hablarte en sueños sobre las cosas que han estado en tu mente. Pídeme una información actualizada; para que Yo te muestre cómo están progresando las cosas. Puede que te sorprendas de lo que te mostraré si tan solo me preguntas. Mi gracia es más que suficiente para ti. Hoy, recuesta tu cabeza en paz. Mañana, despierta a un nuevo día. Pídeme que active Mis ángeles en tu nombre. Pon la Palabra a trabajar en tu nombre al pronunciarla con tu boca. Yo estoy contigo siempre, incluso hasta el fin del mundo. Te amo y nunca te abandonaré, nunca por toda la eternidad”.
Salmos 84:8-12 Señor, Dios de los ejércitos, ¡oye mi oración! Dios de Jacob, ¡escúchame! ¡Míranos, Dios y escudo nuestro, y posa la mirada en el rostro de tu ungido! Es mejor pasar un día en tus atrios que vivir mil días fuera de ellos. ¡Prefiero estar a la puerta de tu templo, oh Dios, que vivir en las mansiones de la maldad! Tú, Dios y Señor, eres sol y escudo; tú, Señor, otorgas bondad y gloria a los que siguen el camino recto, y no les niegas ningún bien. Señor de los ejércitos, ¡cuán dichoso es el que en ti confía!
Con amor y oraciones,
