SALMO 71:20-21 Tú, que me has hecho ver muchas angustias y males, Volverás a darme vida, Y de nuevo me levantarás de los abismos de la tierra. 21 Aumentarás mi grandeza, Y volverás a consolarme.
Estamos apenas comenzando un nuevo año, y posiblemente para muchas personas estos tiempos pasados han sido de muchas angustias y males, pero hoy puede ser para nosotros con la ayuda de Dios un tiempo de nuevos comienzos, pues en él hay nueva vida, en él está la fuerza para levantarnos y en él está nuestro consuelo.
Pero ¿que necesitamos para que este año 2022 sea para nosotros un tiempo de NUEVOS COMIENZOS? ¿Qué necesitamos para que sea un tiempo para dejar atrás las angustias y los males? Veamos lo que nos enseña la palabra de Dios:
I) TENEMOS QUE RESPONSABILIZARNOS Y DEJAR DE BUSCAR CULPABLES (LAMENTACIONES 3:39-40) ¿Por qué se lamenta el hombre viviente? Laméntese el hombre en su pecado. 40 Escudriñemos nuestros caminos, y busquemos, y volvámonos a Jehová;
Tenemos que comprender que mientras siempre busquemos culpables y señalemos a otros por todo lo malo que estamos enfrentando en nuestra vida no podremos cambiar, no podremos tener un nuevo comienzo.
Responsabilizarnos significa dejar de echar la culpa a otros y como dice el texto que hemos leído, tenemos que escudriñar nuestro propio camino, reconocer nuestros propios errores, reconocer que posiblemente todo lo que estamos viviendo ha sido por causa de habernos alejado del Señor, y tenemos que tomar la decisión de volver.
Dedicarnos a buscar culpables y señalar a otros hace que tomemos una actitud de victimismo, y nos hace creer que no somos nosotros los responsables de lo que pasa en nuestra vida. Es por eso que tenemos que cambiar el papel de víctimas y levantarnos, reconociendo nuestros errores, reconociendo nuestras faltas, reconociendo nuestras malas decisiones, pero también reconociendo que con la ayuda de Dios podemos comenzar de nuevo, podemos comenzar a escribir una nueva historia.
II) ES NECESARIO CERRAR CICLOS, PARA COMENZAR TIEMPOS NUEVOS EN NUESTRA VIDA (GÉNESIS 19:15-17) Y al rayar el alba, los ángeles daban prisa a Lot, diciendo: Levántate, toma tu mujer, y tus dos hijas que se hallan aquí, para que no perezcas en el castigo de la ciudad. 16 Y deteniéndose él, los varones asieron de su mano, y de la mano de su mujer y de las manos de sus dos hijas, según la misericordia de Jehová para con él; y lo sacaron y lo pusieron fuera de la ciudad. 17 Y cuando los hubieron llevado fuera, dijeron: Escapa por tu vida; no mires tras ti, ni pares en toda esta llanura Y cuando los hubieron llevado fuera, dijeron: Escapa por tu vida; no mires tras ti, ni pares en toda esta llanura; escapa al monte, no sea que perezcas.
Para Lot y su familia estaba a punto de comenzar algo completamente nuevo, lejos de una ciudad llena de pecado, de maldad y de violencia, es por eso que él Señor les dijo “escapen por su vida y no miren atrás”
Muchos de nosotros no podemos comenzar cosas nuevas en nuestra vida porque no queremos dar por terminadas aquellas cosas que nos han lastimado, que nos han llevado al fracaso, que nos han causado pérdidas y amargura a nuestra vida, siempre volvemos atrás, siempre queremos regresar ahí donde tanto daño nos han hecho.
Es necesario cerrar ciclos, de amistades dañinas, de relaciones destructivas, de lugares en los que ya no tenemos que estar, de negocios fraudulentos, y de todo aquello que lo único que ha traído a nuestra vida es dolor, fracaso, amargura, etc.
III) NO MENOSPRECIES TUS PEQUEÑOS COMIENZOS, A PESAR DE LO QUE DIGAN LOS DEMÁS, PON TU CONFIANZA EN DIOS (ZACARÍAS 4:10) Porque los que menospreciaron el día de las pequeñeces se alegrarán, y verán la plomada en la mano de Zorobabel. Estos siete son los ojos de Jehová, que recorren toda la tierra.
Nadie dice que comenzar de nuevo sea fácil, pero vale la pena, no te desanimes por los pequeños cambios que hay, no te desanimes por los pequeños resultados que hay en tu vida, posiblemente habrán personas que se burlaran, te criticaran, querrán desanimarte,
Pero tienes que saber que todo lo que comenzamos en el nombre del Señor, buscando su voluntad, queriendo agradar al Señor, aunque pueda parecer insignificante, aunque pueda parecer que no vale la pena, tienes que confiar que tus nuevos comienzos aunque sean pequeños en la mano de Dios crecerán y fructificaran para bendición de tu vida y para gloria y honra del Señor. (Job 8:7) Y aunque tu principio haya sido pequeño, Tu postrer estado será muy grande.
