Pero tú me darás las fuerzas del búfalo, y me ungirás con aceite fresco. Mis ojos verán la derrota de mis enemigos; ¡mis oídos oirán los gritos de angustia de mis adversarios! Salmos 92:10-11
¡Es tiempo de que la unción del buey salvaje estalle en tu vida! Dios me dio una palabra para el lanzamiento del libro, «The Wild Ones», que quiero profetizar:
El enemigo ha invertido todos sus esfuerzos y tiempo tratando de mantenerte oculto/a para que nunca descubrieras quién fuiste llamado/a a ser. Ha intentado mantenerte en disfunción para que nunca descubrieras la unción y el mensaje que fuiste creado/a para entregar. Ha intentado detenerte, estancarte y retrasarte con una infinidad de tareas para mantenerse en control. Ha visto la voz con la que naciste y no ha escatimado esfuerzos para asegurarse de que vivas silenciado/a y enjaulado/a toda tu vida. Ha utilizado la religión para rechazarte y evitar que tengas influencia. Ha utilizado a personas que deberían haber sido tus defensores para herirte, para que nunca intentes levantarte nuevamente. Ha tratado de hacerte sentir como un/a leproso/a y indigno/a, para que nunca te des cuenta del poderoso portavoz y hijo/hija que fuiste llamado/a a ser. Los orfanatos han estado llenos, pero hoy marca un nuevo día para la Iglesia donde las puertas se están abriendo.
LOS OCULTOS ESTÁN EMERGIENDO, LAS CADENAS SE ESTAN SACUDIENDO
El Señor ha dicho: «Durante demasiado tiempo, Mis profetas y Mi novia han sido enviados bajo tierra o han muerto antes de tiempo. El enemigo ha intentado hacer que Mi novia sea desdentada y débil, pasiva e impotente, pero hoy Mi rugido está despertando su rugido de nuevo». Sí, es tiempo de que el rugido te restablezca, te sane y te rescate del pozo en el que has estado.
Amós 3:8 NVI Ruge el león; ¿quién no temblará de miedo? Habla el Señor omnipotente; ¿quién no profetizará?
Las heridas y los traumas no están ligados a tu nombre ni a tu identidad. Ellos no te definen. Puedes confiarlos a Jesús y seguir adelante. Es tiempo de que hagas temblar las jaulas y sueltes tus ataduras de una vez por todas. Es tiempo de quitarte las etiquetas que te han impuesto y rechazar las maldiciones que se han pronunciado sobre ti. Sal de la narrativa del enemigo para tu vida y adéntrate en el camino y el plan del Señor. Es tiempo de que seas cabeza y no cola, es tiempo de estar por encima y no por debajo. Es tiempo de que aceptes tu voz única y te sacudas el temor al hombre que te ha afligido.
YA NO NECESITAS COMPARARTE MAS
Ya no necesitas vivir atormentado por las mentiras de los enemigos y atrapado en los interminables ciclos de confusión de identidad y propósito. Ya no necesitas seguir buscando la aprobación de los hombres. No necesitas los certificados de los hombres. Solo necesitas el aceite de la unción de Jesús y Su aprobación. Tienes permiso para ser el abridor de brecha al que fuiste llamado. Tienes permiso para ser indigno como David, adorando el arca hasta devolverla a su lugar legítimo. Tienes permiso para vivir para la audiencia de uno solo y moverte al ritmo del León de Judá.
Salmos 92:10 TPT Tu unción me ha hecho fuerte y poderoso. Has empoderado mi vida para el triunfo al derramar sobre mí aceite fresco.
Eres el búfalo ungido para derribar principados y fortalezas. Eres el caballo de guerra desenfrenado en primera línea, proclamando un nuevo día de avance y victoria después de una temporada de desesperanza y miedo. Pero debes poner fin a lo viejo y tomar lo nuevo. No puedes llevar ambos. En 2 Reyes 6, mientras la compañía de profetas construía la nueva y ampliada casa de los profetas, se cayó un hacha al agua y se perdió. Eliseo arrojó una vara al agua y el hacha flotó. Entonces Eliseo les dijo: «¡Recógela!».
2 Reyes 6:6-7 El hombre de Dios preguntó: «¿Dónde cayó?». Cuando le mostraron el lugar, Eliseo cortó un palo y lo lanzó allí, y el hierro flotó. Él dijo: «Recógelo». Y extendió su mano y lo tomó.
Escucho al Señor diciendo hoy: «Recógelo. Recoge lo que dejaste caer. Toma lo nuevo. No te contengas. No seas cortés. ¡Toma lo que es tuyo por la fuerza!». Así como Elías arrojó su manto sobre Eliseo y él inmediatamente sacrificó a los bueyes y partió en su nueva odisea, ahora estás reconociendo la hora presente. (2 Reyes 2:11-14)
- Es tiempo de que recojas tu manto y sacrifiques tus viejos bueyes. Las cosas viejas deben ser soltadas.
- Es tiempo de dejar de mirar atrás, soltar el pasado y seguir adelante.
- Es tiempo de dejarlos ir. Perdónalos. Sigue adelante.
- Es tiempo de soltar los bueyes, las fortalezas del pasado, y tomar tu unción de búfalo rompedor de fortalezas.
- Es tiempo de sacudirte la apatía y la derrota.
- Es tiempo de romper todos los lazos con la esperanza frustrada y la pérdida y el dolor de las promesas rotas.
- Es tiempo de cambiar la leche por carne y el azúcar por sustancia.
- Es tiempo de ser un agente de cambio.
- Es tiempo de ser un toque de trompeta de verdad en este tiempo de mentiras manipuladoras.
- Es tiempo de derribar los muros que la religión solo ha fortalecido a través de pactos con la contaminación y la mezcla.
- Es tiempo de desalojar a los reyes equivocados y establecer la justicia en ciudades y regiones de la tierra.
- Es tiempo de atacar el reino de las tinieblas y recuperar el terreno perdido.
- Es tiempo de ver los años devueltos que devoraron las langostas.
- Es tiempo de sacudirte todos los yugos y vivir en la libertad del espíritu.
- Es tiempo de ver el poder de la Sangre de Jesús en acción en tu vida, familia y misión.
- Es tiempo de que entres en la vida abundante de Juan 10:10.
- Es tiempo de asaltar las puertas del infierno y recuperar todo lo que te han robado a ti y a cada persona mientras ibas camino a la destrucción. (Una palabra profetica de Nate Johnston)
Salmos 92:12-15 NTV Pero los justos florecerán como palmeras y se harán fuertes como los cedros del Líbano; trasplantados a la casa del Señor, florecen en los atrios de nuestro Dios. Incluso en la vejez aún producirán fruto; seguirán verdes y llenos de vitalidad. Declararán: «¡El Señor es justo! ¡Es mi roca! ¡No existe maldad en él!».
Con amor y oraciones,