“Octubre es un mes para entrar en los verdes pastos del Buen Pastor para muchos de ustedes. Dejarán atrás la creencia de que están en el rebaño del asalariado. (Juan 10:12) Este es un espíritu de huérfano y una creencia de que serán abandonados. Están a punto de entrar en el espíritu de adopción y la promesa de una vida abundante. Su mentalidad está cambiando de creer que son huérfanos para saber que son hijos; esto los está guiando hacia el rebaño y pastos del Buen Pastor. Ya no escucharán más la voz del ladrón. Por fe entrarán plenamente por la puerta del redil del Buen Pastor. Rechazan la creencia de que están a punto de perderlo todo y ser devorados, porque esa es la voz del ladrón. Reciban y acepten la promesa de Jesús de que serán salvados y llevados a Su prado y seguridad. Pasen por la puerta de Cristo hacia el lugar que ya les ha sido dado. Dirijan su oído a Su voz y crean Sus promesas sobre su vida. ¡Serán salvados del ladrón! (Kathi Pelton)
Porque estrecha es la puerta y angosta la senda que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan. Mateo 7:14
Escuché al Espíritu del Señor decir: «La puerta que tienes ante ti en este momento es pequeña. No puedes atravesar llevando el peso y las cargas que llevas actualmente.No puedes traer el equipaje que estás llevando contigo. No puedes aferrarte a las decepciones y a la esperanza frustrada del pasado».
«Por eso te has sentido atascado, porque estás en un lugar donde estoy limpiando tu alma y cortando todos los lazos con el camino detrás de ti. Te estoy devolviendo a la simplicidad. De vuelta a tu primer amor. De vuelta a lo que realmente importa. Te estoy desvinculando de personas tóxicas que solo han traído presión, división y conflicto a tu llamada. Estoy rompiendo ataduras del alma con personas y movimientos que no has enfrentado y que te han mantenido en esclavitud, confusión y enfermedad espiritual».
«Estoy liberando tu mano de la cesta y tu alma de yugos que nunca te impuse. Estoy cerrando misiones falsas y todos los lugares donde te has extendido demasiado por el bien del reino, pero nunca te lo pedí. Te estoy llamando de vuelta a lo que parece ser el punto de partida, pero no es para castigarte, sino para liberarte. Porque has estado viviendo demasiado tiempo abrumado, ansioso y ya no disfrutas el viaje».
«Has vivido en un estado tenso y has perdido la inocencia y la alegría que quería que tuvieras. Cansado de la batalla, oprimido, desanimado y sintiéndote espiritualmente apagado, pero te estoy reviviendo al liberarte. Librándose de las listas interminables, problemas infinitos, aflicciones y tormentas que te persiguen».
SI, MIRAME RESCATARTE Y REINICIARSE
Jeremías 30:8 NVI En aquel día”, afirma el Señor de los Ejércitos, quebraré el yugo que mi pueblo lleva sobre el cuello, romperé sus ataduras
«Porque estás entrando en una temporada de libertad, frescura y la capacidad de avanzar en lo que no pudiste antes. Estoy quitando el peso del mundo de tus hombros, el yugo de tu cuello y el trauma de tu alma. Estoy restaurando tus sueños, tu revelación y tu capacidad para escuchar mi voz fácilmente de nuevo. Es tiempo de liberarte de la carrera de ratas que el enemigo ha puesto ante ti, que es un desvío del camino que tengo para ti. El camino que tengo para ti no está en la trayectoria que te agota y te quema, sino para aumentar y hacerte florecer”
Porque incluso ahora estoy revirtiendo el agotamiento que ha sido enviado para derribarte antes de que siquiera comiences. Y ahora, te llenaré mientras te libero. Romperé el camino mientras te rindes, guiándote hacia senderos seguros, dirección clara y una temporada de firmeza y establecimiento. En lo que parece que te estoy disminuyendo, es mi mano sobre tu vida AUMENTÁNDOLE al LIBERARTE. Así que acuéstate en Mi presencia y permíteme reiniciar tu corazón y guiarte hacia el lugar que he preparado para ti, dice el Señor. (Una palabra de Nate Johnston)
Hebreos 12:1 Por lo tanto, ya que estamos rodeados por una enorme multitud de testigos de la vida de fe, quitémonos todo peso que nos impida correr, especialmente el pecado que tan fácilmente nos hace tropezar. Y corramos con perseverancia la carrera que Dios nos ha puesto por delante.
Con amor y oraciones,
