En mi país El Salvador y posiblemente en otros países de latinoamerica es muy común ver que todo trabajador, campesino, empleado, albañil, mecánico, maestro, etc, se distingue por algo, no solo por ser esforzado, y buen trabajador, sino porque siempre en su espalda lleva una mochila.MATEO 12-35-
Pero la pregunta es ¿que llevan en esa mochila? Normalmente en esa mochila llevan la ropa de trabajo, los libros de estudio, la comida para el almuerzo, etc.
Pero cuando uno observa los rostros de esas personas que llevan esas mochilas sobre su espalda, los rostros de esas personas que van a trabajar, que van para sus centros de estudios, uno puede darse cuenta que muchas de esas personas, hombres y mujeres, llevan un peso, y no en su mochila, sino en su corazón, es lo que van cargando en su interior.
Podemos ver muchas personas van en los buses con la mirada perdida, van caminando con lagrimas en sus ojos, algunos van murmurando algo en sus labios, quizás a ti te ha pasado querido hermano o hermana que escuchas este mensaje o lees este bosquejo, que vas por la vida y has llegado al final de este año 2019 con un peso muy grande en tu corazón.
Es por eso que este día vamos a comparar nuestra vida, nuestro corazón, con esa mochila que la gran mayoría de salvadoreños llevamos en nuestra espalda, y nos vamos a preguntar, ¿que llevo ahí? ¿que voy cargando en mi interior? ¿habrán cosas buenas y agradables a Dios o habrán cosas malas que no son agradables para él y que afectan nuestra vida?
Primeramente respondamos a una pregunta muy importante ¿que llevas en tu mochila de la vida? ¿qué es lo que vas cargando en tu corazón?
¿TRISTEZA? Por las situaciones que estás viviendo, por los problemas de tu vida
¿FRUSTRACIÓN? por que las cosas no han salido como tu pensabas o como tu querías, quizás te sientes frustrado por las oportunidades perdidas o por las cosas que no hiciste en tu vida.
¿DESESPERANZA? Porque posiblemente piensas que las situaciones que estás viviendo en tu familia, en tu matrimonio, con tus hijos, con tus finanzas, ya no se pueden cambiar o arreglar.
¿DESÁNIMO? Porque piensas o te han dicho que ya no vale la pena seguir luchando por las cosas que anhelas porque de todas formas no las vas a poder conseguir.
Entonces ¿qué tenemos que hacer para poder cambiar esas actitudes, para poder vaciar esa mochila del corazón de todo aquello que no nos permiten experimentar el amor, y el poder de Dios en nuestra vida?
tenemos que traer a Jesús nuestra carga (Mateo 11:28)
¿Alguna vez le has contado a tu padre celestial como te sientes? ¿has hablado con Jesús sobre tu desánimo? ¿has hablado con Jesús sobre la frustración que sientes en tu corazón? ¿alguna vez le has dicho que sientes que no hay esperanza en tu corazón?
Seamos honestos, la mayoría de nosotros los cristianos venimos a Jesús, buscando ayuda, buscando un milagro, pero no venimos a descansar en él, pero la palabra de Dios nos dice que es necesario que pongamos en las manos de nuestro Dios con humildad todas nuestras cargas y ansiedades (1 Pedro 5:6-7)
Cuando vaciamos la mochila de nuestro corazón en las manos del Señor y le entregamos a él todo lo que nos está afectando es entonces que podemos llenarnos de todo lo bueno que el Señor quiere darnos para nuestra vida.
¿De qué tenemos que llenar la mochila de nuestro corazón para comenzar y terminar en victoria este nuevo año 2020?
TENEMOS QUE LLENARNOS DE ESPERANZA (Romanos 15:13) Tenemos que tener esperanza porque nuestro Dios es un Dios de esperanza, y nuestra esperanza no está puesta en lo que tenemos sino en lo que creemos y la palabra de Dios nos dice que al que cree todo le es posible.
TENEMOS QUE LLENARNOS DE ÁNIMO (JOB 19:25) Tenemos un redentor que está vivo, aunque nosotros desfallezcamos él nos ayudará, él nos levantará, él nos dará su victoria.
TENEMOS QUE LLENARNOS DE ALEGRÍA (SALMO 30:5 Y 11) ¡Dios cambiará tu problema en bendición y tu tristeza en alegría!
