Yo conozco tus obras. Mira, he puesto delante de ti una puerta abierta que nadie puede cerrar, porque tienes un poco de poder, has guardado mi palabra y no has negado mi nombre. Apocalipsis 3:8
En mi tiempo de oración le pregunté al Señor cuál era Su palabra para el mes de abril y me dijo: “ABIERTO” “EN ABRIL ABRIRE PUERTAS”. Me mostró el arca de Noé siendo sacudida por las olas y llegando a descansar sobre el monte Ararat. Luego dijo:
“¡Es tiempo de que salgan de su escondite! He hecho subir el agua y me he apoderado de todo lo que les era familiar. Les he dado instrucciones específicas, planes y planos, que han seguido fielmente, y en obediencia, aunque aún no había evidencia de lluvia. Los he llevado a través de un tiempo de aislamiento, de purificación, de desprendimiento, para que pudieran confiar y depender completamente de Mí. Por su obediencia y perseverancia, los he preservado y ahora es tiempo de que vengan a su lugar de descanso, y salgan de su escondite. Es un lugar muy alto, un lugar sin ruido y sin confusión, un lugar inaccesible, si no es a través de las aguas crecientes”.
“¡No se han estrellado! ¡Han venido a descansar sobre La Roca! Verán que mientras más grande era la inundación, y más pesada era la lluvia, más alto se levantaban. Porque la prueba de su fe los ha hecho «a prueba de choques». No habrían podido llegar a un lugar tan alto y tranquilo si no fuera por la inundación y la lluvia. Tuvieron que aprender a navegar por las aguas, para que pudieran estar preparados para las puertas abiertas, las oportunidades y las conexiones, que Yo les voy a presentar, a partir de este mes. Cuando salgan de su escondite, verán, escucharán y percibirán como nunca. No habrá interferencias, ni desenfoques, ni cuestionamientos”.
“Las cosas serán más claras y fáciles que antes, no porque Yo lo haga más fácil, sino porque ustedes saldrán más fuertes, más sabios, más hábiles y con un nivel más alto de discernimiento. Cuando empiecen a reconstruir sobre las ruinas del pasado, un viento fresco vendrá sobre ustedes, y los hará construir más rápido, más grande y mejor que nunca. Correrán y no se cansarán, caminarán y no desfallecerán, porque han esperado pacientemente y con expectativa en Mí. Así como el arca llegó a descansar en el monte Ararat que significa “maldición revertida”, y así como Noé, significa «descanso» y llegó a un lugar de descanso, Yo su Dios, Jehová Jireh, revertiré la maldición en su vida, y los llevaré a un lugar de descanso. Cuando construyan un altar en su corazón, para honrarme, y para conmemorar lo que he hecho por ustedes, Mi presencia estará con ustedes, en ustedes, y alrededor de ustedes, todos los días de su vida”.
¡Aleluya! ¡Qué maravilloso Abba tenemos!
“Esto es para todos aquellos que han sido y están siendo zarandeados por las olas. Los que se sienten perdidos y solos. Los que se sienten impotentes y sin esperanza. Los que han sido obedientes, pacientes y no han perdido la esperanza ni aún en medio de la tormenta. Él no los ha olvidado Todo fue por su propio bien, todo fue para llevarlos más alto, más cerca de Él. Para que pudieran estar preparados, equipados y listos para lidiar con las puertas que Él está a punto de abrirles.
ABRIL significa «ABRIR» Literalmente el Señor abrirá puertas que parecían completamente selladas. El les presentará oportunidades que nunca habían soñado. Él no se ha olvidado de ustedes ni de las promesas que les ha hecho. Recuerden incluso los sueños que han olvidado. Y cuando sucedan, los recordarán y se asombrarán completamente de Su amor. Él está dando vida a los huesos secos de su vida, En su alma, en su mente, en su cuerpo, en su familia, en su matrimonio, en finanzas, en su trabajo, en su ministerio, en su iglesia, en su ciudad, en su nación, en cada aspecto de su vida” ¡Veo ABIERTO, ABIERTO, ABIERTO! ¡ENTRAR ENTRAR, ENTRAR! De ustedes depende cruzar el umbral. (Rosangela Atte)
Isaías 22:22 NVI Sobre sus hombros pondré la llave de la casa de David; lo que él abra, nadie podrá cerrarlo; lo que él cierre, nadie podrá abrirlo.
Génesis 8:1-4 NVI Dios se acordó entonces de Noé y de todos los animales salvajes y domésticos que estaban con él en el arca. Hizo que soplara un fuerte viento sobre la tierra, y las aguas comenzaron a bajar. Se cerraron las fuentes del mar profundo y las compuertas del cielo, y dejó de llover. Poco a poco las aguas se fueron retirando de la tierra. Al cabo de ciento cincuenta días las aguas habían disminuido. El día diecisiete del mes séptimo el arca se detuvo sobre las montañas de Ararat.
Con amor y oraciones,
