Salmo 110:1 «Así dijo el Señor a mi Señor: «Siéntate a mi derecha hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies».
Conocer quién es DIOS es importante para saber qué hizo DIOS por nosotros y qué es lo que el futuro después de la muerte tiene para nosotros. Así es como encontramos algunas de las DOCTRINAS más importantes para la Iglesia y su misión de proclamar el Evangelio en este Salmo. Trataremos los siguientes puntos:
Este Salmo Mesiánico es el Texto del Antiguo Testamento más citado en el Nuevo Testamento. Las expresiones son las de un profeta que ha recibido una revelación de Dios. David oyó una conversación celestial entre JEHOVÁ y el SEÑOR de David, es decir, entre Dios el Padre y el Mesías. El Salmo es citado por el mismo SEÑOR JESUCRISTO quien nos muestra Su Interpretación correcta.
El Hijo de David. (Mateo 22:41-45) «Mientras estaban reunidos los fariseos, Jesús les preguntó: 42 ―¿Qué piensan ustedes acerca del Cristo? ¿De quién es hijo? ―De David —le respondieron ellos. 43 ―Entonces, ¿cómo es que David, hablando por el Espíritu, lo llama “Señor”? Él afirma: 44 »“Dijo el Señor a mi Señor: ‘Siéntate a mi derecha, hasta que ponga a tus enemigos debajo de tus pies’ ”.[e] 45 Si David lo llama “Señor”, ¿cómo puede entonces ser su hijo?» 46 Nadie pudo responderle ni una sola palabra, y desde ese día ninguno se atrevía a hacerle más preguntas.»
La pregunta más importante en el mundo es: ¿Quién es JESÚS? El mundo siempre ha ofrecido diferentes opiniones.
En estos tiempos, las diferentes Religiones, sectas y algunas posiciones políticas, nos muestran a JESÚS como a un hombre bueno y digno de imitar, pero hasta ahí solamente; un hombre bueno.
Pero todas esas respuestas lo único que dicen es que JESÚS es un hombre cualquiera.
Sin embargo, el SEÑOR JESÚS ahora en nuestro Texto nos muestra VERDADERAMENTE quien es JESÚS.
El SEÑOR JESUCRISTO les hace a los Fariseos la pregunta: ¿Qué piensan ustedes acerca del Cristo? ¿De quién es hijo?
La respuesta de los fariseos es en parte correcta solamente, ya que ellos creían que el Mesías o el Cristo era descendiente de David, pero seguía siendo un hombre solamente.
O sea, esos fariseos pasaron por alto las tantas Profecías que hablan del Mesías o Cristo como mucho más que un hombre; o sea, Divino.
La Respuesta del SEÑOR JESÚS es que, si JESUCRISTO es Hijo de David solamente, ¿por qué David lo llama SEÑOR siendo David el Rey? David como Rey no tenía a otro ser humano superior a él. Pero aquí SEÑOR es un título de DIVINIDAD, refiriéndose al MESÍAS o CRISTO.
Muchos llamaban a JESÚS como era conocido: EL HIJO DE DAVID. O sea, el Mesías o el Cristo.
Así la multitud que recibió al SEÑOR JESÚS en la ENTRADA TRIUNFAL A JERUSALÉN en ese día que conocemos como Domingo de Ramos, gritaba:
«¡Hosanna al Hijo de David! ―¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! ―¡Hosanna en las alturas!» (Mateo 21:9b).
En ese momento, ellos estaban reconociendo que JESÚS era el Mesías prometido, el Hijo de David que se iba a sentar en el trono y gobernar. Pero dejaban a un lado que el Cristo o Mesías, era mucho más que un hombre; o sea, Divino.
Nótese que el verso 46 dice que nadie le pudo responder. En el Texto paralelo de Marcos 12:37b dice que «La muchedumbre lo escuchaba con agrado.» William Barclay agrega:
«Habría pocos aquel día- que captaran algo de la grandeza de lo que Jesús quería decir; pero cuando Jesús pronunció estas palabras, aun el más torpe de ellos sentiría el escalofrío de la presencia del misterio eterno: Tendrían el sentimiento sobrecogedor de que habían oído la voz de Dios; y por un momento; en este Hombre Jesús vislumbraron el rostro del mismo Dios.»
El Hijo de Dios. (Mateo 16:13-17) «Cuando llegó a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: ―¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre? Le respondieron: 14 ―Unos dicen que es Juan el Bautista, otros que Elías, y otros que Jeremías o uno de los profetas. 15 ―Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo? 16 ―Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente —afirmó Simón Pedro. 17 ―Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás —le dijo Jesús—, porque eso no te lo reveló ningún mortal,[c] sino mi Padre que está en el cielo.»
La pregunta del SEÑOR JESÚS a Pedro recibe la respuesta correcta sobre quien es JESÚS.
Pedro no solamente lo llama el CRISTO, o Mesías, sino que también lo llama EL HIJO DE DIOS.
En estos días son muchos los Cristianos que llaman a JESÚS su mejor amigo o un compañero, y es cierto que el SEÑOR JESÚS es nuestro mejor amigo, pero en realidad, Él es mucho más que eso, y debemos hablar de JESÚS como Él es, como debemos HONRARLO, COMO DEBEMOS ADORARLO: EL HIJO DEL DIOS VIVIENTE; el mismo DIOS.
Debemos ADORAR a JESUCRISTO por quién es Él:
Porque JESÚS es DIOS.
Por Su Obra Redentora en la Cruz del Calvario.
Por Su Resurrección de los muertos.
Por Su Exaltación en Gloria sentado a la diestra del Padre.
Nótese que el Salmo 110:1 estaba profetizando que quien está sentado a la diestra de DIOS el PADRE es el SEÑOR JESÚS. Eso es porque JESUCRISTO ES DIOS.
(Marcos 16:19) «Después de hablar con ellos, el Señor Jesús fue llevado al cielo y se sentó a la *derecha de Dios.»
(1ª Corintios 15:23-25) «Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; después, cuando él venga, los que le pertenecen. 24 Entonces vendrá el fin, cuando él entregue el reino a Dios el Padre, luego de destruir todo dominio, autoridad y poder. 25 Porque es necesario que Cristo reine hasta poner a todos sus enemigos debajo de sus pies.»
Sentado a la DIESTRA DE DIOS como hemos leído en nuestro Texto de 1 Corintios 15:23-25 el cual está citando el Salmo 110:1, no es otra cosa que ser DIOS.
La pregunta merece una respuesta. ¿Qué dice usted sobre quien es JESÚS? Debemos recordar que JESUCRISTO es el HIJO DE DIOS, pero también es SEÑOR. O sea, JESÚS ES JEHOVÁ. En el Nuevo Testamento, SEÑOR es la traducción para JEHOVÁ en el Antiguo Testamento. La explicación es UN SÓLO DIOS, pero TRES PERSONAS EN EL SER DE DIOS.
Nótese que cuando confesamos que JESUCRISTO ES EL SEÑOR, debemos analizar bien si lo hemos hecho totalmente SEÑOR de nuestras vidas.
O sea, nuestra manera de vivir y de expresarnos, debe mostrar que JESUCRISTO es SEÑOR de nuestras vidas.
Quien es JESÚS en nuestras vidas es evidente en la manera en que oramos a Dios, en la manera que lo ADORAMOS, y en la manera que CONFIAMOS en Él.
Recordemos que, si JESUCRISTO es SEÑOR de nuestras vidas, el siempre cuida de nosotros. O sea, cuando todo marcha bien, y también en medio de la adversidad.
Para concluir, Mateo 28:19-20 dice: «Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, 20 enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.»