Generalmente en nuestra iglesia cuando llega el momento de recoger los diezmos y las ofrendas durante los cultos, decimos que es un gran privilegio llevar sobre nuestros hombros la carga económica del evangelio de nuestro Señor Jesucristo.NUMEROS7-4-9-
Y eso como ya lo vimos en el texto no es solamente una frase para motivar a los hermanos a tener un corazón dadivoso para ofrendar y diezmar, sino que era un ministerio que desempeñaban los hijos de Coat, los cuales eran hijos de Leví, la tribu apartada por Dios para servir en el tabernáculo de reunión.
Los sacerdotes y levitas tenían distintas funciones dentro del tabernáculo: tenían que realizar los sacrificios, se encargaban de recibir los animales de manos del pueblo, se otros se encargaban de armar la tienda del tabernáculo en el desierto, etc, pero los hijos de Coat tenían un solo ministerio: cargar sobre sus hombros el tabernáculo, cargar sobre sus hombros el lugar donde Dios se reunía con su pueblo (Números 4:15)
Pero hoy en día ya no existe mas el tabernáculo de reunión, porque ahora la morada del Espíritu Santo somos cada uno de los creyentes que hemos recibido a Cristo como nuestro salvador y Señor, pero aunque no haya más tabernáculo que cargar, siempre sigue siendo necesario hermanos y hermanas, hombres y mujeres de valor que quieran tomar el ministerio que dejaron los hijos de coat,es decir llevar sobre sus hombros la carga, ya no más del tabernáculo, sino del Reino de Dios.
La iglesia necesita nuestro hombro para cargar ya no mas los utensilios del tabernáculo, sino para llevar una carga aún más preciosa y más poderosa, la iglesia necesita nuestro hombro para llevar la carga del evangelio, la carga económica de llevar adelante el Reino de Dios en este mundo, la carga espiritual y material para que el reino de Dios avance cada vez más.
Ahora ya no están los hijos de Coat para poder su hombro, por eso ahora nos corresponde a cada uno de nosotros tomar una decisión radical (Romanos 12:1)tomemos el ministerio de los hijos de coat, pongamos nuestros hombros para llevar adelante el reino de nuestro Dios, ya no solamente pongamos las manos para pedir, como normalmente lo hacemos, pongamos nuestros hombros para llevar la carga de nuestro Dios y su iglesia sobre nosotros.
¿QUE SIGNIFICA LLEVAR SOBRE NUESTROS HOMBROS LA CARGA MATERIAL Y ESPIRITUAL DEL REINO DE DIOS?
- Significa ser fieles con nuestros diezmos y ofrendas (Malaquias 3:10)
- Significa poner al servicio o a la disposición de Dios lo que él nos ha dado: Nuestros bienes, nuestros talentos, nuestro tiempo (Lucas 8:1-3)
- Significa orar por pastores y por lideres y servidores de los ministerios de la iglesia(2 Tesalonicenses 3:1)
- Significa salir a predicar el evangelio de nuestro señor jesucristo (Marcos 16:15)
Y la mayor motivación para poner nuestro hombro para llevar la carga de la iglesia y del Reino de Dios viene cuando comprendemos que nuestro Señor Jesucristo ya puso su hombro para llevar la pesada carga de nuestra vida.
A) EL LLEVÓ SOBRE SUS HOMBROS LA CRUZ PARA MORIR POR AMOR A CADA UNO DE NOSOTROS (JUAN 19:17-18)
- Nuestro Señor Jesucristo puso su hombro para cargar su cruz, esa cruz que tenía que ser cargada por cada uno de nosotros, la llevó él para morir en lugar de nosotros.
B) EL CARGO TODO LO PEOR DE NOSOTROS SOBRE SÍ MISMO (ISAIAS 53:4-6)
- Como nos lo muestran estos preciosos versículos nuestro Señor Jesucristo cargó en la cruz del calvario nuestras enfermedades, nuestros dolores, nuestras rebeliones, nuestro castigo, y todos nuestros pecados.
C) EL ES QUIEN NOS HA CARGADO EN CADA MOMENTO DE NUESTRA VIDA (ISAÍAS 46:1-4)
- Los ídolos son llevados sobre los hombros de los que los adoran, los tienen que cargar ellos porque no tienen vida y no pueden hacer nada, pero nuestro Dios, el nos carga a nosotros, desde el vientre de nuestra madre, hasta la vejez el nos ha cargado, el nos ha ayudado, él ha soportado todo, todas nuestras malas desiciones, todas nuestras rebeliones, todas nuestras equivocaciones, el siempre nos ha soportado por amor.
TENEMOS QUE COMPRENDER TAMBIÉN QUE HAY GRAN BENDICIÓN CUANDO ESTAMOS DISPUESTOS A LLEVAR LA CARGA DEL REINO DE DIOS (SALMO 20:3-4 /PROVERBIOS 3:9-10)
