―Porque tienen muy poca fe —les respondió Jesús—. Si tuvieran siquiera una fe tan pequeña como un grano de mostaza, podrían decirle a aquella montaña que se quitara de en medio y se quitaría. Nada les sería imposible. Mateo 17:20 NBV
Amado/a hijo/a: En este tiempo, Yo estoy trayendo un nivel mayor de fe en tu vida. La fe ha sido llamada a comenzar como una pequeña semilla, y aunque su inicio puede parecer pequeño e insignificante, su potencial es inmenso. Esta semilla debe germinar, fortalecerse y expandirse hasta convertirse en un árbol que produzca fruto abundante. Ahora es el momento de que tu fe crezca, porque cosas grandes se acercan para tu vida; promesas que he declarado sobre ti están a punto de cumplirse. Y para recibirlas y caminar en ellas, necesitas una fe sólida y madura.
Recuerda que la fe viene por la Palabra (Romanos 10:17, RVR1960). Esto significa que cada vez que te sumerges en mis palabras, cada vez que las medidas y las dejas arraigarse en tu corazón, estás alimentando y fortaleciendo tu fe. Lee mi Palabra, deja que ella hable a lo profundo de tu ser. Memorízala para que esté siempre presente en tu mente, aún en los momentos de dificultad. Permítele ser tu guía y tu fundamento, de modo que cuando enfrentes desafíos, te aferres a ella y encuentres en ella la fuerza que necesitas.
Además de escuchar mi Palabra, aplicarla a tu vida diaria es esencial. No es suficiente saber lo que te he dicho, debes vivirlo, caminar en ello y tomar decisiones basadas en la verdad que te he revelado. A través de este proceso, tu fe no solo se fortalecerá, sino que crecerá con profundidad y estabilidad. Estarás preparado/a para ver mis promesas manifestarse y caminar en lo que he diseñado para ti.
No estás solo/a en este camino de crecimiento. Yo mismo te ayudaré a que tu fe crezca. Te sostendré en cada paso y te capacitará para avanzar en lo que te he llamado a hacer. Aunque el camino pueda parecer incierto, mi presencia te acompañará y mi mano te guiará en todo momento. Este es un tiempo en el que estoy edificando en ti una fe inquebrantable, una fe que no solo resiste las pruebas, sino que florece en medio de ellas, declara el Señor. (Una palabra de Luis y Mercedes de Aquino – Ministerios Elías)
Hebreos 11:1-2 RVC Ahora bien, tener fe es estar seguro de lo que se espera; es estar convencido de lo que no se ve. Gracias a ella, nuestros antepasados fueron reconocidos y aprobados. 3 Por la fe entendemos que Dios creó el universo por medio de su palabra, de modo que lo que ahora vemos fue hecho de lo que no se veía.
Con amor y oraciones,
