Después de esto miré, y he aquí una puerta abierta en el cielo; y la primera voz que oí, como de trompeta, hablando conmigo, dijo: Sube acá, y yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas. Apocalipsis 4:1
El tiempo y la temporada de Apocalipsis 4:1
Una noche de Julio ya muy tarde, sentí que el Señor me invitaba a renunciar al sueño y a pasar tiempo con Él. Dios no me decepcionó. Él recompensa a quienes lo buscan diligentemente. No pasó mucho tiempo antes de que el Señor comenzara a encontrarse conmigo y tener una visión. Vi esta puerta que se abría y al Señor llamándome hacia la nueva puerta. Escuché al Señor que decía: “A mediados de agosto, entrarán en un tiempo y una estación de Apocalipsis 4:1, mientras entran al nuevo año 5784”. Vi al mes de agosto como una bisagra que nos empujó hacia arriba a través de la puerta de septiembre, mientras entramos en el nuevo año hebreo 5784. (Nuevo año en el calendario hebreo que inicia este 15 de Septiembre al atardecer)
La puerta abierta a una nueva dimensión
Las puertas son portales o aberturas de luz que permiten que la actividad espiritual, como los seres angelicales, se mueva entre el Cielo y la Tierra. Los portales se abren desde el Cielo hacia la Tierra. Los portales pueden ser demoníacos o divinos. La escalera de Jacob en Génesis 28 y en Juan 1, son dos portales notables referenciados en la Biblia. En Juan 1:47-51, Jesús le muestra a Natanael una nueva revelación concerniente a los portales celestiales. Los ángeles ya no ascienden y descienden sobre la tierra en un lugar específico; ahora ascienden y descienden sobre Jesús. Esta fue una nueva revelación que Jesús lanzó cuando dijo: “Ya no tienes que esperar en un momento o un lugar determinado; Yo soy el portal”. Dondequiera que esté Jesús, siempre habrá una puerta/portal abierto para el Cielo.
Juan 1:51 Y le dijo: De cierto, de cierto os digo: De aquí en adelante veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre.
En esta temporada de Apocalipsis 4:1, Dios está llamando a su pueblo hacia una nueva dimensión y un lugar de madurez. Debemos mantenernos en el espíritu, donde estamos sentados con Cristo en los lugares celestiales, para operar en las cosas de Dios (Efesios 2:6). Debido a Cristo, tenemos acceso a lugares y reinos en Cristo. Es tiempo de que encontremos una nueva revelación y nuevos lugares en Él. Al encontrar estos lugares, aprenderemos a vivir de ellos. Él quiere revelarte las cosas por venir.
El Umbral de 5784: Una puerta nueva
En mi estudio de 5784, descubrí que el número cuatro está representado por la letra hebrea “dalet” (porque dalet es la cuarta letra del alfabeto hebreo). Dalet puede significar “pobre, puerta y levantar”. Una de las razones de la intensidad de la batalla, es porque estamos en el umbral de una puerta nueva. El Apóstol Pablo dijo en 1 Corintios 16:9: “Porque se me ha abierto una puerta grande y eficaz, y muchos son los adversarios”. Una puerta es un lugar de autoridad. Las puertas representan lugares de transición. Se pasa de una dimensión a la siguiente. El umbral marca el final y el principio de una cosa. Cuando abres una puerta, estás atravesando la atmósfera para entrar en la habitación contigua. Para muchos de ustedes, julio fue el cierre y la conclusión de un capítulo de sus vidas. Cuando entraron en agosto y a punto de entrar en el año 5784, están entrando en un nuevo capítulo; lo viejo se fue y lo nuevo está aquí. Hubo mucho bullicio y anticipación en torno al mes de agosto. Realmente se está produciendo un cambio.
Puertas de influencia
Dependiendo de la puerta a la que nos acerquemos, puede moldear nuestros puntos de vista e influir en nosotros. Dios le dijo a Abraham en Génesis 15:5: “Y lo llevó fuera, y le dijo: Mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar. Y le dijo: «Así será tu descendencia”. Abraham no tuvo una perspectiva nueva hasta que salió por la puerta y entró en un nuevo lugar. En ese momento, su mente pasó desde la duda hacia la fe. La tienda de Abraham representaba su antigua estación y su mentalidad. Tan emocionados como podríamos estar por lo nuevo, podemos sabotearnos a nosotros mismos si nos quedamos en la misma puerta, “solo asomándonos hacia lo nuevo”. Para atravesar la puerta debemos salir del miedo y entrar en la fe.
Mientras Dios te lleva a través de las puertas de promoción, debes preparar tu corazón. Esto es lo que el Señor estaba haciendo con Abraham. David lo dijo así en el Salmo 119:32: “Por el camino de tus mandamientos correré, cuando ensanches mi corazón”. En otras traducciones dice “cuando ensanches mi entendimiento”. Para que podamos entrar en las puertas y en los lugares que Dios tiene para nosotros en el año 5784, debemos tener una gran capacidad en cada área de nuestra vida. No podemos operar en el mismo odre que lo hicimos en la temporada pasada y esperar nuevos resultados. Necesitamos la ayuda del Señor para expandir nuestras fronteras, porque nuevas oportunidades y experiencias ponen una mayor demanda y presión sobre nosotros. Debemos estar preparados para el crecimiento.
Puertas y llaves
Creo que a medida que entramos en el 5784, estaremos llegando a una mayor medida y revelación de la “llave de David”. En Isaías 22 se describe la historia de Sebna y Eliaquim. Sebna era el guardián de la casa durante el reinado de Ezequías, pero se volvió orgulloso. Debido a su orgullo y a su deseo de ser como Dios, el Señor lo degradó y levantó a Eliaquim en su lugar. Isaías 22:20-22 dice: “En aquel día llamaré a mi siervo Eliaquim hijo de Hilcías, y lo vestiré de tus vestiduras, y lo ceñiré de tu talabarte, y entregaré en sus manos tu potestad; y será padre al morador de Jerusalén, y a la casa de Judá. Y pondré la llave de la casa de David sobre su hombro; y abrirá, y nadie cerrará; cerrará, y nadie abrirá”.
Estamos entrando en una gran temporada de degradación y promoción en el Cuerpo de Cristo. Incluso veremos esto en el reino secular. Dios está colocando nuevos porteros en su casa y removiendo a aquellos que se envanecieron a sí mismos. Dios les está dando nuevas llaves de autoridad a aquellos que permanecieron humildes y puros. Los que llevan a Cristo y se visten de Él, llevarán la llave suprema, la “Llave de David”. ¿Cuál es la “Llave de David”? Jesucristo mismo.
Escuché al Señor decir: “Se les concederá acceso a los que lleven la “Llave de David”. La “Llave de David” les permitirá a los porteros abrir o cerrar puertas sobre diferentes ciudades, regiones y naciones. Esto será clave para los intercesores en el futuro. Dios les está entregando nuevas estrategias y llaves a sus intercesores, para ver el avance tan esperado. Yo declaro y decreto que la frustración y el cansancio se están rompiendo en los intercesores ahora, en el nombre de Jesús, amén. Lo que era difícil será fácil y lo que se levantó en el camino será derribado. Dios te está entregando la llave correcta, mientras esperas en Él.
Puertas de prueba
Habrá puertas de prueba que encontraremos en el año 5784. Dios está separando el trigo de la paja. Vamos a continuar viendo una línea divisoria muy notable en el Cuerpo de Cristo. Hay demasiada mezcla en el Cuerpo de Cristo. Daniel 2:35 dice: “Entonces fueron desmenuzados también el hierro, el barro cocido, el bronce, la plata y el oro, y fueron como tamo de las eras del verano, y se los llevó el viento sin que de ellos quedara rastro alguno. Mas la piedra que hirió a la imagen fue hecha un gran monte que llenó toda la tierra”. Como hubo tanta mezcla en el Cuerpo de Cristo, se generó una imagen que ya no se parece a Cristo.
Aquellos que no están dispuestos a ser probados por el fuego de Dios, no serán calificados por el Señor. Ser probado y marcado por el fuego de Dios, te hace legal en la dimensión del Espíritu. Pablo dijo en 1 Corintios 3:13-14: “… la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará. Si permaneciera la obra de alguno que sobreedifica, recibirá recompensa”. A medida que pase el tiempo quedará más claro quién está construyendo sobre Cristo o construyendo su propio reino.
La imagen de la palabra hebrea “DALET” no sólo representa a una puerta, sino a “una persona pobre” (no necesariamente pobre en las cosas monetarias, sino alguien que camina en humildad y es consciente de que no posee nada propio). Son conscientes de que lo que tienen viene de Dios y sin Él, no tienen nada. La palabra “DALET” representa “dilisoni”, que significa “levantarme”. Mientras esperas en Dios en esta estación, confía en su tiempo para tu vida. No te eleves a ti mismo. Deja que Dios te eleve y te promueva en el tiempo correcto (1 Pedro 5:6-7). Él es la gloria y quien levanta tu cabeza, y te elevará por encima de tus enemigos.
¡Haz retroceder el miedo y ora por el avivamiento y el despertar!
En el año 5784, creo que habrá un aumento de persecución en las naciones. Veo que la persecución vendrá a través de ciertas leyes que serán aprobadas y ciertas libertades que estarán en juego. Habrá más exposición e historias de noticias que saldrán a la luz, concerniente a cuánto nos está monitoreando realmente nuestro gobierno. Los creyentes no pueden retroceder o encogerse de miedo. Debemos estar firmes en la Palabra de Dios y hacer retroceder la agenda de las tinieblas que realmente quiere apoderarse de esta nación. Aunque la persecución aumentará, Jesús será el cuarto hombre en el fuego con nosotros (Daniel 3). No importa cómo se vea tu horno de fuego, Dios todavía está contigo y su gloria será magnificada a través de tu vida. Su prueba será tu testimonio para que todos lo vean. (Una palabra de Madeline James)
Con amor y oraciones,
