Articulos

Dios recupera lo perdido

Cuando experimentamos una caída o fracaso, o de repente aparece una gran crisis familiar, podemos pensar que todo va a terminar, que ese es el fin o que no hay solución posible. Nos sentimos impotentes ante los grandes problemas, o concluimos que ya no hay ninguna otra oportunidad. Pero la Biblia nos enseña que el Señor puede transformar y restaurar todas las cosas, Dios recupera lo perdido pues él es Todopoderoso…

“Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.” Génesis 1:2.

1) Aunque la condición sea adversa.

Al observar la condición de nuestra tierra según el texto citado, podemos ver inicialmente por lo menos tres características: desorden, vacío y tinieblas. No podemos negar que en algunos momentos de nuestro vivir, nos asemejamos a esa situación, porque a causa de los problemas, o por las malas decisiones, nuestra familia y finanzas sufren el desorden; por nuestra desobediencia vivimos un vacío, como si estuviéramos caminando sobre nada y las fuerzas de las tinieblas arremeten contra nuestro corazón, mente y emociones. Es un momento difícil.

Adquiere ahora sin costo alguno nuestro libro cristiano, un texto que edificará tu vida y la de aquellos que te rodean. Aquí en: GRATIS LIBRO CRISTIANO.

2) El Espíritu Santo no abandona a los suyos.

Es muy alentador ver lo que la Biblia nos dice a continuación, pues “el Espíritu de Dios se movía”; Dios no abandonó su creación, él no desamparó su obra, él mismo estaba allí y no estaba quieto se estaba moviendo. La frase “se movía” es una traducción del término hebreo “rakjáf” palabra que también traduce: empollar, revolotear.

Al considerar la situación inicial de la tierra nosotros diríamos: “no hay nada que hacer, todo está muy mal” o “es imposible restaurar” pero el Señor estaba allí preparando el momento para intervenir, estaba allí cubriendo con sus alas, organizando, cómo las aves se disponen para el nacimiento de sus polluelos.

Dios haría una maravillosa obra, veríamos luego una tierra reordenada y hermosa, una tierra en las mejores condiciones posibles; esta sería la casa para su nueva creación: el hombre. Desde el comienzo de la Escritura vemos el amor y cuidado de Dios por sus hijos.

SUSCRÍBETE GRATIS y recibe nuestras actualizaciones en tu e-mail, HAZ CLICK AQUÍ

3) Dios usa Su poderosa palabra para restaurar.

La biblia nos dice: “Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz” Génesis 1:3, vemos pues que Dios habló: “y dijo Dios”, de la boca del Señor salen ahora Sus palabra, ésa Palabra que transforma, que restaura y ordena todo lo que está mal y desordenado en nosotros.

Esa Palabra que corrige e ilumina nuestras decisiones, aquella que nos alimenta y edifica; por eso debemos bendecir y amar Su palabra. Por eso el salmista también dijo: Lámpara es a mis pies su palabra, y lumbrera a mi camino, es la palabra de Dios la que nos lleva a tomar las mejores decisiones.

Adquiere ahora sin costo alguno nuestro libro cristiano, un texto que edificará tu vida y la de aquellos que te rodean. Aquí en: GRATIS LIBRO CRISTIANO.

4) Jesucristo es la luz de los hombres.

En respuesta a la palabra que Dios pronunció aparece la luz, es importante recordar que la luz del sol y de las estrellas aparece después, cuando fueron creados en el día cuarto, entonces ésta es la luz de Dios mismo la que resplandece.

El Señor Jesús dijo: “yo soy la luz del mundo”, es Su luz la que necesitamos cada día de nuestra vida, ante ésta luz las tinieblas son esparcidas, los poderes demoníacos retroceden, es ésta luz la que saca a los prisioneros de los oscuros calabozos de la aflicción y la muerte, es la luz que brilló para salvación de los hombres.

Conclusión: Dios envió a su Hijo Jesucristo para restaurar todas las cosas. No importa que haya ocurrido, o en qué condiciones pueda estar tu vida, éste es el momento para acercarse al Señor y permitir que su orden, su palabra y su luz vengan y hagan Su poderosa obra en el corazón. Confía en el Señor, Dios recupera lo perdido.

Fuente:
Pastor Gonzalo Sanabria

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Botón volver arriba