Recuerdos de cuando reías, de cuando aparentemente eras feliz y no te habías dado cuenta, son los que ahora vienen a tu mente, y vienen porque analizas tu actual estado y te das cuenta que la sonrisa se ha borrado de tu rostro, que la fe poco a poco se te va acabando y que los problemas se van incrementando.
Ver a tu matrimonio casi destruido debido a los constantes desacuerdos y las peleas continuas que eran el pan de cada día, ver como lo que un día soñaste ahora se está volviendo en la pesadilla que nunca hubieras querido vivir.
Darte cuenta que ya ha pasado mucho tiempo y sigues tocando puertas y esas puertas no se abren para conseguir ese empleo que tanto anhelas.
Cuestionar el porqué de tanta espera y de pronto hasta reclamar a Dios una respuesta que no se ve por ningún lado.
Sentir que tu vida no tiene sentido porque los planes no te están saliendo como lo esperabas.
Llorar cada noche esperando una respuesta, sentir un dolor profundo dentro de ti porque nada está saliendo como quisieras y para colmo cada vez más aumentan los diferentes problemas.
Todos estos estados de ánimo son el resultado de algo difícil que te está tocando enfrentar, de algo que por alguna razón tu mente te hace pensar que esta vez no podrás salir de eso.
Sin embargo, cuando tu mente trate de hacerte creer que no saldrás de esta, debes recordar que durante toda tu vida te has enfrentado a diferentes situaciones, unas más difíciles que otras, y de todas ellas Dios te ha sacado adelante.
No ha existido ni un momento de tu vida en el cual Dios no haya estado allí para darte las fuerzas necesarias para salir de todo lo que has enfrentando, para darte la sabiduría para salir adelante, para hacerte sentir que Él no te ha abandonado.
En medio de tus debilidades Él te fortaleció, en medio de tus quejas, Él te consoló, en medio de tu soledad, Él te escuchó, y siempre, escúchalo bien, siempre, estuvo allí para sacarte adelante.
¡Esta vez no será la excepción!, ¡Dios lo hará otra vez!, Dios ha de sacarte adelante porque cuando lo buscas de corazón lo encuentras, porque cuando derramas tu alma delante de su presencia su oído se inclina a tu oración, porque cuando tratas de agradarlo con todas tus fuerzas, Él premia tu esfuerzo.
¡Dios lo hará otra vez!, Él pondrá en orden todo en tu vida, tu única tarea es creerle y buscarlo de corazón porque cuando depositamos nuestra total confianza en Él, Él no nos falla siempre que eso que le pidamos esté en sus planes.
Hoy quiero invitarte a creer una vez más que Dios puede restaurar tu matrimonio, que Dios puede convertir el corazón de tu pareja, que Él puede avivar el fuego del amor que aparentemente se ha extinguido, que Él puede volver a poner en cada uno de ustedes los ojos de amor como el primer día de que declararon amor mutuo.
Hoy quiero invitarte a que creer una vez más que Dios te otorgará ese empleo que andas buscando, que las hojas de vida que fuiste a deja a esas empresas serán efectivas, que el negocio que quieres iniciar será éxito, que Dios estará contigo en lo que emprendas como lo ha estado toda tu vida.
Hoy quiero invitarte a darte cuenta lo valioso y valiosa que eres para Dios, que no importa los errores que has cometido porque cuando de corazón sincero te arrepientes y buscas a Dios, lo encuentras.
Ya no te dejes engañar por el enemigo que lo único que quiere es verte derrotado, destrozado y sin un verdadero sentido de vida. En su lugar comienza a creer a Dios y a su palabra, y su Palabra nos dice en esta hora:
“Dios hará que vuelvas a reír y a lanzar gritos de alegría.”
Job 8:21 Traducción en lenguaje actual (TLA)
Creamos a esa promesa, creamos a esa declaración por fe, Dios hará que volvamos a sonreír porque Él estará obrando en nuestra vida de una forma especial.
Él lo hará otra vez, Él hará cosas maravillosas en tu vida porque encontró en ti un corazón sincero, una vida que le cree, una vida que confían en Él, una vida que depende de Él y Dios jamás desampara a los que en Él confían, así que ¡Adelante!, ya no llores más, ya no te menosprecies más, ya no te sientas una persona fracasada, porque Dios hará algo hermoso nuevamente como siempre lo ha hecho en tu vida.
Hoy quiero orar por tu vida para que Dios termine de hacer lo que ya comenzó a hacer en tu vida:
“Padre Eterno que estás en los cielos, te doy gracias por este momento tan precioso que nos has regalado, te doy gracias porque sé que estás con nosotros y hoy, en este lugar, puedo sentir tu presencia. Te doy gracias porque a pesar que nuestra mente a veces nos hace pensar que no podremos salir de los problemas que estamos enfrentando, tu Palabra nos motiva a creerte porque has prometido grandes cosas para nuestra vida y nosotros lo creemos.
En esta hora, oro por cada una de las personas que leerán estás palabras, oro por cada uno de ellos a quienes tu conocer personalmente y sabes bien lo que están viviendo. Oro para que tu restaures matrimonios, para que proveas empleos, para que des mucha sabiduría y para que fortalezcas la vida de aquellos que se sienten solos y tristes. Hoy te pido que una hermosa unción de tu Santo Espíritu inunde nuestro ser y renueve nuestras fuerzas, así como también nuestra fe para poder creer a lo que tú ya estás haciendo en nuestra vida.
Dios mío, con todo mi corazón y con la mayor fe posible te pido que obres en la vida de cada uno de aquellas personas que en este mismo instante toman para si estás palabras y te comienzan a creer sin dudar, porque tú oh Dios, honras la fe de los que te creen. Yo bendigo la vida de cada una de estás personas y las pongo en tus manos, teniendo la certeza que tú obraras en sus vidas.
Gracias Dios mío, en el Nombre Poderoso de Jesús, Amén.”
¡Dios lo hará otra vez! ¡Él pondrá en orden todo en tu vida!
¡Créelo por fe y lo recibirás!
