Principal

Dios es un Dios de misericordia

Cuando yo leo las Escrituras veo continuamente ese carácter misericordioso de Dios, esa bondad increíble mezclado con Su santidad y por eso es que yo trato siempre en mis sermones y en mi trato Pastoral de imitar en todo lo posible ese balance que yo veo.

Se me ocurre por ejemplo aún yendo en el Antiguo Testamento donde la gente pensaría: bueno era la ley y ahí se ve reflejado un Dios severo y exigente del Antiguo Testamento, vemos que Dios no ha cambiado Su perspectiva, Él no cambia; Él es el mismo ayer y por los siglos de los siglos.

Y aún en el Antiguo Testamento yo veo esa misericordia y esa gracia de Dios claramente reflejada. Escucho pasajes de la Escritura como ese que dice: «Misericordioso y clemente es Jehová, lento para la ira y grande en misericordia.» Dice que: «No ha hecho con nosotros conforme a nuestros pecados ni nos ha tratado conforme a nuestras rebeliones sino que como el padre se compadece de los hijos se compadece Jehová de los que le temen porque Él conoce nuestra condición, se acuerda de que somos polvo.»

Creo que son palabras del Salmo 103 si no me equivoco y vemos allí esa descripción del carácter de Dios que dice que Él es misericordioso y compasivo. Es como que siempre el balance de Dios se inclina un poquitito hacia la misericordia más que hacia el juicio y el castigo.

Dios es un dios que por naturaleza mismo es atraído hacia la compasión y la misericordia, el perdón y la paciencia. ¿Cuántos siglos bregó Él con Su pueblo Israel que lo ofendió en maneras tan obvias y tan horrorosas y siempre estuvo tratando con Israel para no enjuiciarlo de una forma cortante y terminante?

Recuerdo en Jeremías capítulo 29 cuando el Señor le escribe una carta de amor a Su pueblo que está en Babilonia exiliado por su pecado, Dios le había advertido muchos siglos a Israel que si continuaban ofendiéndolo con adoración a otros dioses y con alianzas ilegítimas Él los iba a sacar de la tierra que les había entregado y finalmente tuvo que hacerlo contra Su Voluntad y los manda a Babilonia, y allá están ellos exiliados y deprimidos y siente como que Dios ya no los ama por su mala conducta y se sienten tentados a decaer en su ánimo y a simplemente como que desaparecer de la Tierra en esa tierra hostil de Babilonia donde se encuentran.

Y Dios les escribe una carta amorosa con Su profeta Jeremías y les dice: No decaigan en su ánimo, usted lo puede buscar en Jeremías 29: No dejen de reproducirse, casen a sus hijos y a sus hijas, compren tierras, planten jardines y huertos y vivan una vida normal hasta que Yo los saque de su castigo. Interesantemente Dios todavía no había terminado de cumplir la condena de ellos y ya estaba pensando en el tiempo de la restauración y esa Palabra bella del Señor que dice: «Porque Yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, pensamientos de bien y no de mal para restauraros y para daros el fin que vosotros esperáis.»

Qué bella imagen porque dice el Señor: «Porque Yo sé los pensamientos que tengo acerca de ustedes» Yo no los voy a condenar, no los quiero destruir completamente; yo los voy a restaurar y los voy a regresar de nuevo a su tierra y darles de nuevo la bendición que ustedes piensan que jamás ya podrán recibir de Mi parte.

Dios es un Dios de misericordia donde quiera que uno mire en la Escritura uno ve eso ¿no? y los cristianos como nadie tenemos que reflejar esa misma postura de misericordia. Nuestras iglesias deben ser iglesias que se caractericen por eso, nuestras predicaciones tienen que ser predicaciones que reflejen esa bondad y ese amor y esa misericordia de Dios.

Nuestros sermones y nuestras enseñanzas tienen que dejar a la gente no apaleados ni azotados ni sangrantes después de uno de esos sermones rajatabla de santidad sino que deben de salir con esperanza, con el sentido de que: sí, Dios demanda de mí santidad pero también está dispuesto, como el padre trata con los hijos a llevarme por un proceso gradual de maduración. Y mi padre va a entender que yo voy a fallar como los papás entienden que los niños por su falta de madurez y de entendimiento van a hacer tonterías, van a romper un plato o a rayar un sofá y en vez de azotarlos y meterlos en la cárcel tratan con ellos mientras van creciendo y ganando en experiencia y en sabiduría.

Y así debemos ser los Pastores y las iglesias, iglesias que reflejen esa conciencia. Dice ese Salmo 103 que: «Dios conoce nuestra bendición.» Es decir que Dios conoce que somos polvo; somos propensos a pecar, somos propensos a caer, estamos sujetos a esta carne que nos va a traicionar una y otra vez y aún la gente más madura y de más experiencia en el Evangelio van a cometer errores y se necesitan iglesias pastorales y pueblo misericordioso que trate a la gente con paciencia

Cuando lleguen esos pecadores al seno de la Iglesia los reciban generosamente, misericordiosamente y sepan: hey yo sé la condición de ellos porque conozco la propia condición de ellos porque conozco mi propia condición va uno a decir y yo sé que así como a mí me gusta que Dios me trate con misericordia y que entienda mi amor para con Dios y que a pesar de eso le fallo, yo también darle a otros ese mismo derecho.

Y ¿sabe? que cuando hay esa actitud que gobierna la vida de una Iglesia la bendición de Dios cae sobre ella, la protección divina está sobre esa Iglesia también y esa Iglesia va a prosperar, va a ser bendecida y va a mantener al diablo a raya; el enemigo no sabrá qué hacer en una Iglesia donde se refleja ese amor de Cristo y esa misericordia porque el diablo sólo sabe bregar con el fuego y la violencia y el juicio pero no sabe bregar con el fruto del Espíritu Santo y esa es una manera de mantenerlo neutralizado y esa es una de las formas de guerra espiritual más poderosas.

Así que usemos el amor y la gracia y la misericordia como arma de guerra espiritual y veremos una gran bendición en nuestras vidas y en nuestras Congregaciones. Dios les bendiga.

Fuente:
predicas.org

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Botón volver arriba