Articulos

Descanso y fortaleza en el lugar secreto

Los que viven al amparo del Altísimo encontrarán descanso a la sombra del Todopoderoso. Declaro lo siguiente acerca del Señor: Solo él es mi refugio, mi lugar seguro; él es mi Dios y en él confío. Salmos 91:1-2

Dos palabras proféticas, con una invitación de nuestro Padre Celestial a entrar al LUGAR SECRETO de protección y provisión. Cuando habitamos en el LUGAR SECRETO del Señor, somos conocidos por El; Él nos protege y nos recompensa. Cuando Él nos llama a una temporada de oración y aislamiento, ¡NO DEBEMOS RESISTIRNOS! Porque Él es galardonador de los que le buscan, de los que anhelan estar a solas con El, y se abre una conexión divina directa a Su corazón que abre un torrente de sabiduría y ayuda angelical.

“He sentido un fuerte impulso estas últimas semanas para escapar al LUGAR SECRETO más de lo habitual. Las últimas noches que estuve en adoración tuve una visión de coronas siendo lanzadas a Sus pies que luego se convertían en incienso. (Apocalipsis 4:10-11) He estado consciente, de una manera extrema, de Su deseo de encontrarnos, llenarnos, y pedir una respuesta para «PONER TODO» lo que vale a Sus pies. He sentido fuerte que hay un anhelo de El para que nosotros conozcamos Su corazón en esta hora que contrarrestará la confusión que ha estado tratando de alcanzar y envenenar a la Novia de Cristo”.

El LUGAR SECRETO es su mejor defensa contra cualquier cosa lanzada en su camino, miedo, engaño, desesperanza, así como esas viejas mentalidades religiosas y el legalismo. Sea lo que sea. En Su presencia todas esas cosas torcidas se enderezan y los impostores y obstáculos en su destino no tienen ninguna oportunidad. Ese es su lugar seguro, en ese lugar es donde pueden esconderse y ser limpiados y alineados, donde Su voz ahoga la distracción más fuerte, un lugar donde no viven por reacción y sus opiniones una vez aparentemente importantes pierden todo peso y prioridad. A la vuelta de la esquina hay una nueva liberación, un NACIMIENTO, así que, asegúrese de estar recargados, reabastecidos y refrescados antes de seguir adelante. ¡Jesús ponemos todo delante de ti hoy, eres digno de todo!” (Nate Johnston)

Apocalipsis 4:10-11 los veinticuatro ancianos se postran delante del que está sentado en el trono, y adoran al que vive por los siglos de los siglos, y echan sus coronas delante del trono, diciendo: Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas.

Meditando sobre esto, compartí hace unos meses esta palabra de Phyllis Ford, que sentí era importante recordar en estos momentos de intensas batallas.

“Cuando se levantó el Tabernáculo en Éxodo 40:17, se cree que estaba en la esquina sudoccidental del Monte Sinaí. Sinaí significa «ESPINOSO». Cuando Dios les ordenó que lo levantaran, era lejos de Egipto, pero faltaban unos 241 km antes de que pudieran llegar a Canaán. En obediencia a Dios levantaron el Tabernáculo. Hay momentos en que pasamos por tantas cosas y el Señor nos llama a entrar, a encerrarnos, callarnos y no ser localizables. Pero cuando establecemos el campamento en nuestros corazones delante de la presencia del Señor allí descubrimos Su amor, protección y Su fortaleza al impartir Él sabiduría, orientación y dirección exacta”.

“Muchas veces estamos en un lugar «ESPINOSO», un sitio donde en definitiva la carne no siente ningún confort.  Pero ese lugar espinoso donde decimos que «SÍ» a la voluntad del Señor se convierte en el sitio donde Él nos llevará a la santa morada de Su poder. Allí oiremos Sus instrucciones y permitiremos que el fuego refinador de Su presencia elimine la escoria de nuestras vidas, preparándonos para el siguiente lugar. Por lo tanto, al recrear el Tabernáculo, podemos ser recreados, aun preparados en nuestros corazones y mentes para enfocarnos en aquello que Él está priorizando en nosotros”.

“Así que, no importa lo incómodos que nos sintamos en estos momentos, es en Su habitación donde encontraremos paz. Nuestro mejor oír viene en la paz de Su presencia. Es en esa posición de obediencia donde comprenderemos plenamente las trampas y los engaños que han sido colocados en las afueras del campamento e incluso en su interior. El mejor lugar en el que podemos estar es el centro de Su divina voluntad mientras nos humillarnos ante Él. Pase lo que pase… Abba sabe lo que es mejor para nosotros. Así que caminemos en Sus pasos ordenados”.

Isaías 26:20 Ven, pueblo mío, entra en tus aposentos y cierra tras ti tus puertas; escóndete por corto tiempo hasta que pase la indignación.

Con amor y oraciones,

Fuente:
Magie de Cano

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Botón volver arriba