HEBREOS 12:28 Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia;
Verdaderamente en este año que estamos terminando cada uno de nosotros hemos experimentado las maravillas del Reino de Dios en nuestra vida, hemos experimentado de muchas formas la misericordia, la bondad, y el poder del Rey de reyes en nosotros.
Y a causa de todas las bondades de Dios y de sus maravillas cada uno de nosotros debemos tener UN CORAZÓN AGRADECIDO para con el Señor, pero ¿Cómo podemos expresar nuestro agradecimiento al Señor?
En el texto que hemos leído para comenzar podemos encontrar DOS FORMAS DE SER AGRADECIDOS CON NUESTRO DIOS:
PRIMERAMENTE, SIRVIENDO AL SEÑOR, buscando la forma de que nuestra vida sea útil para el Reino de Dios, trabajando en la iglesia, predicando su palabra, sirviendo a nuestros prójimos, poniendo nuestros dones, talentos y nuestros bienes a disposición de nuestro Dios.
SEGUNDO, AGRADANDO A NUESTRO DIOS: Eso es lo que nuestro Dios verdaderamente quiere de cada uno de nosotros, que no nos conformemos con solamente congregarnos en la iglesia, con tener un privilegio de servicio, con tener un cargo de liderazgo en la congregación, sino que anhelemos CONSAGRAR NUESTRA VIDA AL SEÑOR (Romanos 12:1) Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
¿QUÉ SIGNIFICA CONSAGRAR NUESTRA VIDA AL SEÑOR?
I) SIGNIFICA ENTREGAR COMPLETAMENTE NUESTRA VIDA A DIOS (LEVÍTICO 1:8-9) Luego los sacerdotes hijos de Aarón acomodarán las piezas, la cabeza y la grosura de los intestinos, sobre la leña que está sobre el fuego que habrá encima del altar; 9 y lavará con agua los intestinos y las piernas, y el sacerdote hará arder todo sobre el altar; holocausto es, ofrenda encendida de olor grato para Jehová.(LEVÍTICO 1:10-13) Si su ofrenda para holocausto fuere del rebaño, de las ovejas o de las cabras, macho sin defecto lo ofrecerá. 11 Y lo degollará al lado norte del altar delante de Jehová; y los sacerdotes hijos de Aarón rociarán su sangre sobre el altar alrededor. 12 Lo dividirá en sus piezas, con su cabeza y la grosura de los intestinos; y el sacerdote las acomodará sobre la leña que está sobre el fuego que habrá encima del altar; 13 y lavará las entrañas y las piernas con agua; y el sacerdote lo ofrecerá todo, y lo hará arder sobre el altar; holocausto es, ofrenda encendida de olor grato para Jehová.
Al leer el texto nos daremos cuenta que hay una palabra muy importante, la palabra TODO es decir que se entregaba todo el animal para ser sacrificado, no solamente una parte de él
Es por eso que en el Nuevo Testamento la palabra de Dios nos dice a cada uno de nosotros que debemos ser SACRIFICIOS VIVOS para agradar al Señor (Romanos 12:1) Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
Esto nos dice a cada uno de nosotros que el Señor quiere que le entreguemos toda nuestra vida a él, que no dejemos áreas de nuestra vida sin consagrarlas a él, Dios quiere que le entreguemos todas las llaves de nuestra vida, que no dejemos cuartos privados donde él no puede entrar, que no dejemos áreas privadas donde él no puede llegar, que no dejemos áreas de nuestra vida que no le demos acceso.
II) PARA CONSAGRAR NUESTRA VIDA AL SEÑOR TENEMOS QUE COMPRENDER QUE NUESTRA VIDA YA FUE COMPRADA POR CRISTO (1 CORINTIOS 6:19-21) ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? 20 Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.
Ese precio de rescate que Él pagó por nosotros se llama REDENCIÓN, él pagó para hacernos libres de la esclavitud del pecado. y ese precio fue pagado con la preciosa sangre de nuestro Señor Jesucristo (1 Pedro 1:18-19) sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, 19 sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación,
El apóstol Pablo en la carta a los Corintios nos dice que hemos sido comprados por precio y de que somos propiedad del Señor, y él conocía muy bien lo que significaba la propiedad en el derecho romano en aquel tiempo; Un derecho absoluto del dueño sobre su propiedad.
Los derechos que el propietario tenía sobre su propiedad se resumía en tres clases:
Derecho de servirse de la propiedad, Dios tiene derecho sobre nosotros para que le sirvamos a él y su Reino (1 Corintios 4:1) Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios.
Derecho de obtener frutos o ganancias sobre la propiedad, Dios espera frutos de cada uno de nosotros, y que produzcamos ganancias para su reino por medio de los talentos que él nos ha dado. (Mateo 21:43) Por tanto os digo, que el reino de Dios será quitado de vosotros, y será dado a gente que produzca los frutos de él.
Derecho de disponer de la propiedad y hasta destruirla, Dios tiene derecho como alfarero de nuestra vida de hacer con nosotros que somos barro en sus manos como él disponga, de darnos la forma que él decida. (Jeremías 18:5-6) Entonces vino a mí palabra de Jehová, diciendo: 6 ¿No podré yo hacer de vosotros como este alfarero, oh casa de Israel? dice Jehová. He aquí que como el barro en la mano del alfarero, así sois vosotros en mi mano, oh casa de Israel.
Pero tenemos que comprender algo muy importante: Dios no quiere que lo amemos por obligación o que le sirvamos como dueño sino como nuestro Dios y como nuestro Padre, él quiere que consagremos a él nuestra vida por nuestra propia decisión, por amor a él , con un corazón agradecido,
El Señor quiere que cada uno de nosotros seamos Sacrificio Vivo, es decir QUE PROCUREMOS, QUE ANHELEMOS DE CORAZÓN VIVIR UNA VIDA CONSAGRADA A NUESTRO DIOS, el Señor quiere que nosotros aunque somos de su propiedad nos entreguemos a él por nuestra decisión, entregándonos voluntariamente a el, rindiendo nuestra voluntad a la voluntad de él .
¿YA LE ENTREGAMOS TODA NUESTRA VIDA AL SEÑOR? Estamos a punto de comenzar un nuevo año, es el momento oportuno para poner en las manos del Señor toda nuestra vida, sin limitaciones, sin condiciones, si verdaderamente queremos agradar al Señor.
III) CONSAGRAR TAMBIEN SIGNIFICA DEJAR ALGO COMPLETAMENTE EN LAS MANOS DE DIOS (FILIPENSES 4:6-7) Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. 7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.
No podemos entrar en el 2023 con el corazón llenos de afanes y de preocupaciones, es necesario que pongamos en las manos del Señor todas aquellas cosas que nos han robado la paz en este año que está por terminar.
Tenemos que consagrar, es decir, poner en las manos del Señor todo aquello que nosotros no podemos resolver, todo aquello que nosotros no tenemos el control, todo aquello que nosotros no tenemos la fuerza ni la capacidad de enfrentar, para que sea el Señor quien tome el control, que sea él quien pelee nuestra batalla, que sea él quien nos de la victoria.
Tenemos que reconocer que agradamos al Señor cuando reconocemos nuestra incapacidad y confiamos plenamente en su poder y en su misericordia. (Mateo 11:28) Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.
CONCLUSIÓN: En este 2023 tengamos verdaderamente un corazón agradecido con nuestro Dios, y ese agradecimiento se tiene que expresar en una vida consagrada completamente a nuestro Dios.
