2 CORINTIOS 2:11 para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones.
Cada uno de nosotros como cristianos tenemos que comprender que satanás solamente tiene planes destructivos en contra de nuestra vida, de nuestra familia, de nuestro matrimonio, etc.
A esos planes llenos de maldad del enemigo la palabra de Dios les llama “MAQUINACIONES”, ¿Que significa esa palabra?
Cuando la palabra de Dios habla de «MAQUINACIONES» se refiere a planes o acciones que se llevan a cabo de manera oculta y, por lo general, con malas intenciones. Se utilizan para describir conspiraciones o intrigas, especialmente cuando alguien trama algo para engañar, manipular o causar daño a otros.
Tenemos que saber que el enemigo para llevar a cabo sus maquinaciones en contra de nuestra vida utiliza armas para robarnos la paz, para quitarnos el gozo de nuestro corazón, para llenarnos de amargura, para quitar la armonia de nuestra familia, para hacernos caer y hacernos fracasar, etc.
Es por eso que cada uno de nosotros debemos hacer lo que nos dice el versículo que leímos para comenzar: NO DARLE VENTAJA ALGUNA A SATANÁS, pero ¿Cómo hacemos eso? ¡QUITANDO LAS ARMAS QUE USA EN CONTRA NUESTRA!.
VEAMOS EN LA PALABRA DE DIOS CUÁLES SON ALGUNAS DE ESAS ARMAS DEL ENEMIGO Y COMO PODEMOS QUITARLE ESAS ARMAS PARA NO DARLE VENTAJA SOBRE NUESTRA VIDA:
I) PRIMER ARMA: LOS ERRORES DE NUESTRO PASADO
(HECHOS 9:20-21) En seguida predicaba a Cristo en las sinagogas, diciendo que este era el Hijo de Dios. 21 Y todos los que le oían estaban atónitos, y decían: ¿No es este el que asolaba en Jerusalén a los que invocaban este nombre, y a eso vino acá, para llevarlos presos ante los principales sacerdotes?.
Podemos ver que el apóstol Pablo cuando comenzó a predicar después de haber sido llamado por el Señor, lo primero que recibió fueron ataques con respecto a su pasado, señalamientos por haber sido un perseguidor de la iglesia.
De la misma manera cuando cada uno de nosotros queremos hacer las cosas que agradan al Señor, aparecerá satanás con una de sus armas favoritas que usa en nuestra contra: NUESTRO PASADO, es decir, nuestros errores, nuestros pecados, nuestros malos caminos.
¿CÓMO LE PODEMOS QUITAR ESA ARMA QUE USA EN NUESTRA CONTRA? Tenemos que recordar que nuestro pasado ya fue perdonado por nuestro Dios y que NUESTRO PRESENTE Y NUESTRO FUTURO NO ESTÁN EN LAS MANOS DEL ENEMIGO sino en las manos del Señor
2 Corintios 5:17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
Jeremías 29:11 Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.
II) SEGUNDA ARMA: LA CULPABILIDAD POR LOS PECADOS QUE COMETEMOS
(LUCAS 15:21) Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo.
El enemigo utiliza la culpabilidad por los pecados que hemos cometido para hacernos sentir indignos, para hacernos sentir que somos inmerecedores de recibir bendiciones de parte de nuestro Dios, y muchas veces por esa razón no oramos, por eso muchas personas abandonan las iglesias y sus ministerios, por la culpabilidad de su corazón.
El enemigo pondrá pensamientos o usará personas para decirnos : No eres digno, no mereces nada, eres un sinvergüenza, eres un hipócrita, eres un farsante, y lastimosamente esos ataques dañan grandemente nuestro corazón, es decir que esa es un arma muy efectiva del enemigo en contra de los hijos de Dios.
Satanás utiliza la culpabilidad para recordarnos constantemente nuestros pecados manteniendo nuestro corazón en un estado de vergüenza y desesperación.
¿CÓMO LE PODEMOS QUITAR ESA ARMA QUE USA EN NUESTRA CONTRA?
Primeramente tenemos que reconocer una verdad espiritual: En realidad no tenemos entrada al trono de la gracia de Dios porque seamos dignos, o por nuestros méritos humanos, VENIMOS DELANTE DEL TRONO DE NUESTRO DIOS PORQUE ÉL NOS HA HECHO SUS HIJOS POR MEDIO DE LA FE, porque él es bueno y ha tenido misericordia de nosotros (Gálatas 4:6-7) Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre! 7 Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo.
Segundo, tenemos que comprender que TODOS nuestros pecados han sido lavados y perdonados por medio de la sangre de nuestro Señor Jesucristo, por la tanto el enemigo NO TIENE COMO ACUSARNOS (1 Juan 1:9) Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
Tercero, podemos servir al Señor con la conciencia limpia, SIN CULPABILIDAD, porque hemos sido lavados y limpiados por medio de su sangre (Hebreos 9:14) ¿cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Dios vivo?.
III) TERCERA ARMA: RECORDARNOS SIEMPRE EL DAÑO QUE LAS PERSONAS HAN CAUSADO EN NUESTRA VIDA
(Amós 1:11) Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Edom, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque persiguió a espada a su hermano, y violó todo afecto natural; y en su furor le ha robado siempre, y perpetuamente ha guardado el rencor.
Tenemos que comprender que si algo daña las relaciones con nuestros prójimos es el RENCOR, esto hace que no haya paz ni armonia en nuestra familia, no permite que haya reconciliación en el matrimonio, destruye amistades, divide ministerios y daña la iglesia del Señor.
¿Y cómo logra el enemigo mantener nuestro corazón lleno de rencor? Recordándonos siempre el daño que las personas nos han causado, HACIÉNDONOS CREER QUE ES JUSTO QUE NO LES PERDONEMOS POR TODO LO QUE NOS HAN HECHO.
Esto nos hace vivir llenos de amargura y rencor pues no nos permite perdonar nunca, y no nos permite tener una verdadera reconciliación.
¿CÓMO LE PODEMOS QUITAR ESA ARMA QUE USA EN NUESTRA CONTRA?
Primeramente comprendiendo que cuando nos negamos a perdonar, cuando guardamos rencor los verdaderos afectados somos nosotros mismos pues lo que hay en nuestro corazón afectará nuestra vida entera (Proverbios 4:23) Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida.
Segundo, comprendiendo que perdonar significa negarnos a nosotros mismos para hacer la voluntad de Dios (Colosenses 3:13) soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.
CONCLUSIÓN. Para quitarle las armas al enemigo, es vital que los cristianos comprendamos que Satanás busca constantemente aprovechar nuestras debilidades, pero podemos vencerlo si no le damos ventaja. Reconociendo el poder del perdón de Dios sobre nuestro pasado, rechazando la culpabilidad y el rencor, y confiando en las promesas divinas, podemos desarmar al enemigo y vivir en la libertad que Cristo nos ha dado.