El Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE) envió condolencias a las personas fallecidas a causa de las lluvias torrenciales registradas el sábado, que provocaron pérdidas humanas, viviendas anegadas o destruidas, vehículos deteriorados y dejaron a miles de desplazados y damnificados.
Feliciano Lacen Custodio, presidente de la entidad eclesiástica, informó que desde el domingo, las congregaciones de fe llevan a cabo jornadas de oración al Todopoderoso por las familias que han perdido a sus seres queridos, así como por las familias extranjeras que se encontraban en el país y fueron afectadas por el colapso de una parte estructural del paso a desnivel de la avenida 27 de Febrero con Máximo Gómez.
El presidente de CODUE destacó que fenómenos naturales como los ocurridos el fin de semana pasado son impredecibles y difíciles de controlar. Por ello, enfatizó la importancia de que la población se encomiende a cada momento en las manos del Creador y tome todas las precauciones al transitar por calles y avenidas de la República Dominicana.
Señaló que es necesario realizar una inspección especial en las estructuras colapsadas y aquellas que aparentemente no fueron afectadas, con el fin de detectar posibles fallas o deterioros. Asimismo, abogó por la instalación de sistemas de drenaje y la identificación, con la colaboración del sector empresarial y las universidades, de áreas vulnerables y de riesgo.
«Esperamos como sociedad que las autoridades de gobierno y los organismos de rescate realicen las correcciones necesarias de manera sistemática en las fallas de drenaje de calles y avenidas de muchos sectores del Gran Santo Domingo, situación que contribuye a agravar las inundaciones», concluyó el presidente de CODUE.