En una entrevista muy íntima y personal, Christine D’Clario abre su corazón para compartir la visión de Eterno Live, su primer disco grabado en vivo como parte de la celebración de sus primeros 10 años de ministerio.
La grabación del tan esperado álbum se realizó el pasado 28 de marzo en el Coliseo de Puerto Rico, ante más de 10,000 personas presentes y con más de 150,000 espectadores en línea, que unidos en un mismo sentir pudieron adorar al Dios Eterno.
Con la alegría y espontaneidad que la caracteriza, nos compartió que cada canción e invitado especial en esta producción fue intencionalmente escogido por ella, quien no escatimó esfuerzo ni talento para propiciar un encuentro genuino con Dios, contagiando a la audiencia a rendirse en completa adoración.
EMC: Detrás de cada proyecto hay una historia ¿Cómo nació Eterno Live?
Christine: Al iniciar el proceso de concebir lo que sería este proyecto me encontraba en mi décimo año de ministerio (ahora ya son once). Haber llegado a mi primera década de servicio al Señor y a Su pueblo por medio de la música me hizo preguntarme, “¿qué he hecho en estos diez años, y qué recompensa eterna he acumulado con lo que he hecho?” Me di cuenta de que diez años, aunque pareciera mucho, sólo marcaba el comienzo. Además, en mi reflexión Dios me ayudó a percatarme de la gran necesidad que tenemos de seguir impulsando más y más el reino de Dios en este mundo. Por esto y tanto más, quisimos utilizar nuestras fuerzas para enfocar a nuestros hermanos alrededor del mundo volver a lo básico: amar y adorar a Dios con todo y dirigir nuestras vidas con la mirada puesta en Dios y la eternidad junto a Él, y de esa manera promover la manifestación de Cielo en la Tierra.
EMC: ¿Cómo fue la experiencia de grabar tu primer álbum en vivo?
Christine: Pues realmente ha sido el proyecto que más arduo nos ha hecho trabajar. Fue como tener 4 proyectos en 1: En primer lugar, la elaboración del CD porque hicimos todo en el estudio antes de llevarlo a esa noche de grabación en vivo, más toda la producción, edición, mezcla y masterización. El segundo, la filmación del DVD con más de 15 tomas de cámara y un equipo de más de 20 personas trabajándolo, además del kilometraje en pietaje, y post-producción lo cual fue un gran proyecto. Tercero, producir un evento en vivo para 10,000 personas y todo lo que conlleva el poderlos acomodar a todos, más el andamiaje de equipo técnico audiovisual de alta calidad para poder promover un ambiente que inspirara a enfocarnos en adorar a Dios colectivamente pero como un cuerpo. Y cuarto, producir la transmisión en vivo para Internet, en donde nos vino la real sorpresa de que se conectaron mucho más de 100,000 personas a adorar a distancia con nosotros, gracias a un equipo técnico completamente separado al de producción del DVD.
Decir que fue un desafío es poco, pero ver cómo Dios recompensó nuestra fe y nos ayudó milagrosamente a realizarlo todo es motivo de adorarle aún con más fuerza por este proyecto.
EMC: Precisamente por todo el trabajo que conlleva la realización de un álbum, algunos cantantes señalan que sus discos son como hijos. Si tal es tu caso, nos imaginamos que la selección del nombre de tu nuevo bebe no fue aleatoria. ¿Qué te motivo a llamarlo Eterno Live?
Christine: Le llamamos “Eterno Live,” porque se grabó en vivo en una noche de adoración donde no estábamos enfocado en nosotros, sino en el que mora y opera en nosotros, el Dios Eterno. La visión del proyecto es reunir adoradores con el único fin de exaltar a nuestro Dios y Rey Eterno, para unánimes darle adoración que produzca repercusiones eternas.
EMC: La grabación del disco contó con la participación de algunos de ministerios más respetados y aclamados del momento como Lucía Parker, Marcos Brunet, Daniel Calveti y Marco Barrientos. ¿Qué te motivo a invitarlos a ser parte de este proyecto?
Christine: Tuve el honor de contar con la participación de algunos de mis amigos más amados. Cada uno de ellos ha aportado algo a mi corazón y crecimiento espiritual y personal en gran manera. También cada uno carga una unción muy particular y especial que iba perfectamente en este proyecto. Incluidos en el CD están los temas que canté junto a Lucia Parker y Marcos Brunet. Lucía se ha convertido en una hermana para mí, y una de las muchas cosas que tenemos en común es nuestro amor por nuestro Padre Celestial. Con ella canté una canción inédita titulada “Me amaste a mí”. Marcos Brunet es uno de los adoradores proféticos que Dios ha estado levantando con más fuerza en este tiempo y juntos cantamos “Que se abra el cielo”, en donde ambos entramos en un tiempo profético muy poderoso y especial.
Exclusivamente en el DVD están incluidos los temas “Seguirte” y “Fidelidad,” junto con Marco Barrientos y Daniel Calveti, respectivamente. Daniel Calveti es un amigo muy amado de nuestra familia. Su corazón desborda de amor para todo el mundo, literalmente. Es un pastor en que ama tanto a Dios y a Su pueblo. Aprendo de Él cada vez que nos encontramos ya que la presencia de Dios es notable en su vida. Por su parte, Marco Barrientos es un gran amigo, mentor y modelo a seguir para mí y tantos otros adoradores de nuestra generación. Lo veo como uno de los mayores precursores de la adoración profética hispana en los tiempos actuales. Contar con su presencia en este proyecto añadió una unción sumamente especial.
EMC: De todas las lindas experiencias que viviste, ¿cuál consideras que fue la más memorable?
Christine: Para mí fue ver a tantos adoradores distintos, pero completamente unidos exaltando a Dios. Habíamos más de 10,000 personas, todos unánimes no para pedir o hacer, sino para adorar a nuestro Dios. Hubo varios momentos en que sentí la presencia de Dios tan fuertemente tuve alejarme del micrófono, pero los reunidos seguían cantando solos. Uno de esos momentos ocurrió mientras cantábamos una y otra vez “Dios es Rey, Dios es Rey”, en donde todos llegamos a la realización de lo que realmente cantábamos y a quién le cantábamos y todos comenzamos a aplaudir y a celebrar la presencia de Dios manifestada allí. Todo sucedió sin que nadie nos diera una instrucción, sino movidos por el Espíritu de Dios. Fue realmente indescriptible lo que vivimos esa noche.