Sí, haré ríos en la tierra árida y baldía, para que mi pueblo escogido pueda refrescarse. Isaías 43:20b
En una visión, el Señor me mostró a hombres y mujeres poderosos e influyentes ideando estrategias maliciosas que dañarían a la población en general de las naciones de la tierra. Me sentí profundamente abatido cuando vi las cosas que había concebido. Entonces, la voz del Señor irrumpió proclamando: «Las puertas del infierno no prevalecerán contra Mi Iglesia. Anima a Mi pueblo a orar, porque si ellos oran, verán cómo EXPONDRÉ los planes de los malvados. El clamor de Mis hijos liberará recursos sobrenaturales para proveer y detener al adversario en su camino. El abrasador desierto, donde muchos apenas han sobrevivido, y el clima espiritualmente seco han dejado a muchos sedientos y desesperados de agua. A aquellos que están cansados y agotados, les digo: ¡Resistan, les estoy respondiendo. Estoy creando un oasis en el desierto seco y sediento».
En 2 Reyes 3, se registra la historia de la rebelión del rey moabita contra Joram, el rey de Israel. Joram pidió al buen rey de Judá, Josafat, que se aliara con él en la batalla. Su estrategia incluía pasar por el camino del desierto de Edom. Inesperadamente, siete días después de adentrarse en el áspero desierto, se quedaron sin agua. Estaban en una situación desesperada, muy parecida a la de muchos de ustedes hoy en día. Josafat llamó a un profeta para inquirir al Señor en busca de orientación, y Eliseo profetizó lo siguiente:
2 Reyes 3:17-18 Pues así dice el Señor: «No veréis viento, ni veréis lluvias; sin embargo ese valle se llenará de agua, y beberéis vosotros y vuestros ganados y vuestras bestias». Aun esto es poco ante los ojos del Señor; también entregará en vuestras manos a los moabitas.
Eliseo les dio una instrucción profética: «Haced en este valle muchas zanjas». Básicamente, Dios les instruyó a PREPARARSE para lo que estaba a punto de hacer. Además, el Señor anunció: «No veréis viento, ni veréis lluvias». En esencia, Dios estaba declarando que se preparan para que Él liberará recursos sobrenaturales para Su pueblo. No vendría a través de medios naturales como el viento o la lluvia, sino a través de medios sobrenaturales. Es posible que tampoco puedas ver ahora cómo Dios obrará en tu dilema, pero anímate, porque Dios también obrará de manera sobrenatural por ti.
Escuché al Señor decir: «Prepárate para verme actuar. Prepárate para la provisión sobrenatural que vendrá a ti, a tu familia y a tu nación. Mi agua no sólo satisfará tus necesidades, sino que las superará. Esta agua sobrenatural será de revivimiento, refrescamiento y resucitación para Mi pueblo. Pero no me detendré allí. También servirá como un medio de liberación del enemigo». Así como Dios no se detuvo en llenar las zanjas de agua, fue más allá y usó esa provisión para confundir a su enemigo. El Señor está haciendo lo mismo por ti
2 Reyes 3:21 Y todos los moabitas oyeron que los reyes habían subido a pelear contra ellos. Y convocaron a todos, desde los que podían ceñir armadura para arriba, y se pusieron en la frontera.
Cuando leí este verso, me saltó de la página como un titular profético para hoy: «El enemigo había reunido a todos los que podían vestir armadura». En otras palabras, el enemigo había reunido una multitud de ataques para rodear al pueblo de Dios, tal como está haciendo hoy en día en un intento de intimidarnos y abrumarnos con sus estrategias demoníacas. Su objetivo es que te rindas ante él. Rehúsa permitir que su campaña de presión te haga retroceder de lo que Dios ha declarado que es tuyo. Cava zanjas de fe, esperando que la Palabra de Dios se cumpla. Prepárate para todo lo que Dios ha prometido.
2 Reyes 3:22 Se levantaron muy de mañana, y cuando el sol brilló sobre el agua, los moabitas vieron el agua frente a ellos tan roja como la sangre.
Dios utilizó el agua que Él proporcionó sobrenaturalmente como un arma contra el enemigo. El «otro lado» vio el agua como sangre. Tu adversario verá la sangre sobre ti y tu situación. Siempre que te encuentres bajo presión, puedes clamar la sangre de Jesús. Su sangre testifica que eres Suyo y Él es tuyo. Pagó el costo de la redención y habla de tu gran valía. ¡La sangre reprende al diablo! La sangre habla, diciendo: «¡No te acerques más! ¡No toques a mi hijo!» Cuando los moabitas vieron el agua como sangre, asumieron que Israel y Judá debían haber sido derrotados y fueron a saquear su riqueza. No tenían idea de que Dios había tendido una trampa para traer liberación a Sus elegidos y derrotar a quienes se oponían a ellos.
2 Reyes 3:24 Pero cuando llegaron al campamento de Israel, los israelitas se levantaron e hirieron a los moabitas, y estos huyeron delante de ellos; y los israelitas se adentraron en el país matando a los moabitas.
Cuando los moabitas llegaron al campamento de Israel, los israelitas se levantaron. El plan del enemigo se volvió en su contra. En lugar de saquear los bienes de Israel, fueron derrotados, entonces Israel saqueó sus bienes. Escuché al Señor decir: «Es tiempo de que la Iglesia se levante. Estoy cambiando las mesas a su favor. Los planes del enemigo no prevalecerán. Estoy liberando recursos divinos que no solo los revivirán y refrescará, sino que también confundirá a su enemigo. No se queden ocultos en la desesperación. ¡Levántense! Este es un tiempo de “TODOS A BORDO”. Estoy llamando Mi novia guerrera. Habiendo hecho todo, manténganse firmes en la fe y mírenme obrar en su favor».
Así que, para aquellos que están cansados y desesperados, ¡RESISTAN! Dios está respondiendo a su clamor. Él está proveyendo en el desierto y les está dando una victoria completa sobre el enemigo. Prepárense para experimentar su agua sobrenatural que fluirá para revivir, refrescar y resucitar. (Una palabra de Andrew Tower)
Con amor y oraciones,