LUCAS 6:20-22 Y alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios. 21 bienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados. Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis. 22 bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre.
Según el diccionario Vine del Nuevo Testamento la palabra desventurado bíblicamente hablando significa: Alguien que vive en dificultad, sufrimiento, angustia y miseria.
Definitivamente nadie quisiera que esas palabras fueran una realidad en su familia, de hecho, Dios quiere que nosotros seamos personas y familias bienaventuradas, pero lastimosamente nuestras acciones, nuestras decisiones y nuestras actitudes hacen que poco a poco nuestra familia se convierta en una familia desventurada, llena de dificultades, de sufrimientos de angustias y miseria.
Este día por medio del texto que hemos leído vamos a comprender cuales son las características de una familia desventurada, es decir, familias que viven llenas de tristezas y dificultades y sin poder experimentar las bendiciones de Dios en sus vidas.
VEAMOS LO QUE NOS ENSEÑA LA PALABRA DE DIOS Y RESPONDAMOS LA PREGUNTA ¿CUÁLES SON LAS CARACTERÍSTICAS DE UNA FAMILIA DESVENTURADA? Para conocer esas características vamos a tomar las enseñanzas del Señor sobre las bienaventuranzas, pero de manera inversa, es decir, al contrario, ya que desventurados es lo contrario de ser bienaventurado.
I) PRIMER CARACTERÍSTICA: SON FAMILIAS RICAS EN SOBERBIA (LUCAS 6:20) Y alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios.
El Señor dijo bienaventurados los pobres, es decir los que con humildad reconocen su necesidad de Dios, su necesidad de ayuda, su necesidad de un consejo, su necesidad de ser corregidos.
Una familia desventurada es lo contrario, no tienen humildad, sino que son una familia en la que tanto los padres, como los hijos tienen su corazón lleno de soberbia, y esa soberbia se manifiesta en sus acciones y actitudes:
- Piensan que no necesitan de Dios, que no necesitan congregarse.
- Nadie en ese tipo de familias reconoce sus errores, por lo tanto, les molesta la corrección y eso hace que siempre haya conflictos.
- Son personas sabias en su propia opinión, creen que siempre tienen la razón, y por lo tanto ni piden ni aceptan consejos (Proverbios 26:12) ¿Has visto hombre sabio en su propia opinión? Más esperanza hay del necio que de él.
II) SEGUNDA CARACTERÍSTICA: SON FAMILIAS QUE NO TIENEN HAMBRE DE LA PALABRA DE DIOS (LUCAS 6:21 A) Bienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados.
Una familia que no tiene hambre de la palabra de Dios es porque tanto los padres como los hijos creen que pueden encontrar la satisfacción completa de su vida en cualquier otra cosa que no sea Dios.
Lastimosamente muchas familias están siendo engordadas de materialismo, de vanidad, de mundanalidad, pero están desnutridas espiritualmente. Estas familias tienen pan a su alcance, tienen una iglesia donde pueden congregarse, tienen una Biblia en casa, tienen medios virtuales para escuchar una predicación, pero NO TIENEN HAMBRE.
Pero tenemos que comprender que para nuestra familia es mejor tener hambre de Dios y de su palabra, que tener que esperar que Dios nos haga tener hambre para buscarlo. (Amós 8:11-12) He aquí vienen días, dice Jehová el Señor, en los cuales enviaré hambre a la tierra, no hambre de pan, ni sed de agua, sino de oír la palabra de Jehová. 12 E irán errantes de mar a mar; desde el norte hasta el oriente discurrirán buscando palabra de Jehová, y no la hallarán.
III) TERCERA CARACTERÍSTICA: SON FAMILIAS QUE SE DELEITAN EN EL PECADO (LUCAS 6:21B) Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis.
El Señor dijo que eran bienaventurados lo que lloran, es decir los que lloran por sus pecados, que tienen arrepentimiento sincero en su corazón y necesitan la misericordia y el perdón de Dios en sus vidas.
Pero lastimosamente una familia desventurada es aquella que en lugar de llorar por el pecado que hay en la vida de sus miembros, se deleita en ellos, y en lugar de tener arrepentimiento lo que hay en su corazón hay mayor deseo de seguir en un estilo de vida que no agrada a Dios.
Son familias que encajan perfectamente en la descripción que Dios le mostró al profeta Jeremías sobre la actitud de su pueblo (Jeremías 4:22) Porque mi pueblo es necio, no me conocieron; son hijos ignorantes y no son entendidos; sabios para hacer el mal, pero hacer el bien no supieron.
Y por esa actitud de rebeldía y de altanería se exponen a recibir la disciplina de Dios sobre sus vidas para llevarlos al arrepentimiento (2 Corintios 7:10) Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte.
IV) CUARTA CARACTERÍSTICA: SON FAMILIAS QUE PROCURAN SER AGRADABLES Y ACEPTADOS POR EL MUNDO Y NO AL SEÑOR (LUCAS 6:22) Bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre.
El Señor dijo que somos bienaventurados si somos aborrecidos y vituperados y que nuestro nombre sea desechado como malo por causa del Señor, es decir, por tratar de agradar a Dios con nuestra vida.
Pero una familia desventurada hace lo contrario, ya que primeramente procura agradar a los hombres, ser aceptados por los amigos, por la familia, aunque lo que hagamos sea desagradable al Señor.
Es una familia que no ha tomado en cuenta lo que la palabra de Dios nos dice por medio del profeta Jeremías (Jeremías 15:19) Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré, y delante de mí estarás; y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca. Conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos.
Como familia tenemos que reconocer el peligro de preferir ser amigos del mundo que de nuestro Dios (Santiago 4:4) !!Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.
CONCLUSIÓN: Verdaderamente ser una familia desventurada es algo muy duro, es por eso que el Señor nos hace una llamado este día para dejar de ser desventurados y convertirnos en una familia bienaventurada (Proverbios 1:23) Volveos a mi reprensión; He aquí yo derramaré mi espíritu sobre vosotros, Y os haré saber mis palabras.