Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, carácter probado; y el carácter probado, esperanza; y la esperanza no desilusiona, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por medio del Espíritu Santo que nos fue dado. Romanos 5:3-5
Siento con tanta fuerza que Dios quiere traernos un ajuste masivo esta semana. Muchos se han sentido cargados, agobiados y abrumados por lo que está sucediendo en el mundo y lo que están enfrentando personalmente. Sentí el dolor de la gente y le pregunté al Señor, como lo hago a menudo, «¿Qué estás haciendo?» Entonces esta escritura inundó mi espíritu:
Amós 9:10-13 En aquel día levantaré el tabernáculo caído de David, repararé sus brechas, levantaré sus ruinas, y lo reedificaré como en tiempo pasado, para que tomen posesión del remanente de Edom y de todas las naciones donde se invoca mi nombre—declara el Señor, que hace esto. He aquí, vienen días —declara el Señor—cuando el arador alcanzará al segador, y el que pisa la uva al que siembra la semilla; cuando destilarán vino dulce los montes, y todas las colinas se derretirán. Restauraré el bienestar de mi pueblo Israel, y ellos reedificarán las ciudades asoladas y habitarán en ellas; también plantarán viñas y beberán su vino, y cultivarán huertos y comerán sus frutos.
Retrasos en el rompimiento, la reconstrucción, restauración y ser plantado / establecido por última vez … Esto es puntual para muchos, sentí el viento del Espíritu sobre esta escritura y seguí volviendo a ella, volviendo a leerla una y otra vez. Se siente lo opuesto a lo que muchos están sintiendo ahora, especialmente aquellos que se están moviendo y cambiando y aquellos que han estado en el lugar de retraso “ESTANCADOS” Y “ESPERANDO” durante años. Cuando Dios se mueve así, siempre parece la undécima hora, pero siempre es perfecto. Es el labrador adelantando al segador y la cuerda del arco que ha sido retenida en tensión que se suelta de repente. Siento decirles: PREPARENSE Dios está planeando algo.
¿ESPERANZA O CAOS?
Esta mañana escuché al Señor decir «Están luchando con dos narrativas en este momento, esperanza y batalla y no están seguros de cuál es. Están luchando contra lo que sienten en su espíritu y el contraste de lo que están viendo a su alrededor. Están sintiendo tanto las olas de la fe como los torrentes del temor, la atracción de las fieles promesas cumplidas y el miedo a no verlas nunca cumplidas. Luchan por ver un futuro y, al mismo tiempo, sienten una profunda conmoción por el hecho de que las próximas páginas de la historia aún no han sido reveladas. Las familias al borde del caos tratan de decidir: ¿nos acostumbramos al modo de supervivencia o hay algo que Dios está haciendo y que aún no hemos visto?»
«Diles que en este tiempo en el que el enemigo ha traído la batalla a sus puertas les he llamado a la batalla con esperanza. Diles que son un arma poderosa en Mis manos para esta hora, no para reforzar el temor sino para ser aquellos que señalarán el horizonte y le mostrarán a la gente lo que está por venir y lo que no han estado viendo. Han sido llamados a ser pioneros de Mi corazón de esperanza para las naciones en un tiempo que parece un cuento, para transmitir esperanza, y para sacar a la gente del pozo de la desesperación en que ha estado estancada»
«La esperanza les mostrará el camino a seguir. Les mostrará las estrategias. Les dará la sabiduría para saber qué pasos dar y qué movimientos hacer, sin el temor a las sombrías predicciones de los enemigos. La esperanza se abrirá paso a través de la tormenta de humo que ha dificultado el discernimiento de lo que es la visión profética y el saber adelantarse al enemigo y a los planes de supervivencia que provienen del temor»
¡LEVANTENSE CAMPANEROS DE ESPERANZA!
Entonces tuve una visión y vi a varias personas de pie en una playa mirando al mar y gritando «¡Puedo ver las nubes! ¿Ves las nubes? ¡La lluvia está llegando! ¡La sequía está terminando! El tiempo del hambre no era para siempre». Entonces le oí decir: «¡Levántense campaneros de esperanza! ¡Inunden la tierra con su canto! Sacudan los lechos de muerte con visiones del amanecer, y a los que duermen con sus gritos de alegría. Porque están llamados en esta hora a recordarle a la Iglesia que sus mejores días están aquí AHORA. Están llamados a destruir las profecías apocalípticas con Mi plan de mayor gloria que está ahora mismo llenando la tierra. Los he llamado para luchar violentamente contra las fortalezas demoníacas que mantienen a la gente en esclavitud y quitar el velo de la miseria que ha sido arrojado sobre Mi pueblo. Tocarán campanas y despejarán el aire, disiparán la propaganda del temor y llamarán a Mi ejército de Esperanza a la acción, al frente, a influir y a ser una voz»
«Guerrear con esperanza es guerrear con el poder destructor del yugo de Mi Espíritu que derriba las imaginaciones vanas, los miedos infundados, e introduce Mi plan en un tiempo de inquietud. ¡Los campaneros profeticen ahora mismo! ¡Hablen, y llenen las calles con lo que estoy a punto de hacer! Y lo verán, serán los primeros en ver lo que Yo estoy desplegando en la tierra. Ustedes serán los que marquen el comienzo de mi «DE REPENTE» que cambiará la batalla en la tierra. La batalla no ha terminado porque Mi Pueblo sólo está aprendiendo a levantarse ahora, pero pronto verán que la marea comienza a cambiar»
UNA LIBERACIÓN MASIVA DEL TEMOR Y LA HISTERIA PREMONITORIOS
«Recordarán a la Iglesia dónde ha estado y le señalarán el camino a seguir. Verán la liberación masiva del temor y las fortalezas que han estado sostenidas durante décadas serán confrontadas. La depresión, la ansiedad y los presentimientos están siendo tratados en este momento y esta esperanza que ustedes están negociando dará paso a la libertad en la que Mi pueblo fue llamado a vivir».
Al escuchar estas palabras sentí que el Señor estaba trayendo sanidad y liberación a aquellos que se han sentido desesperados e incluso atormentados por el temor. Vi a la gente arrodillada en rendición usando esas túnicas blancas que habían sido grafiteadas con señales y etiquetas de pandillas, movimientos demoníacos de miedo e histeria, y vi que una lluvia refrescante comenzó a lavarlos y limpiarlos. Si se han sentido grafiteados y manchados por el miedo y han sentido su fortaleza y agarre en su vida este año, Dios no quiere que lo lleven más. Está robando su futuro, está robando su paz, y robando su propósito. Permítanme orar por ustedes «¡El miedo se va ahora en el nombre de Jesús!»
¿Quiénes son los que han sido atormentados en la noche? ¿Quiénes son los que han vivido oprimidos, deprimidos y con una ansiedad que parece no poder sacudirse? ¿Quiénes son los que incluso han pensado en el suicidio? No están solos y no tienen que vivir así un día más. «¡ESPIRITU DE PRESENTIMIENTO, ANSIEDAD, OPRESION, TORMENTO Y SUICIDIO SALGAN DE CADA PERSONA QUE LEA ESTO AHORA EN EL NOMBRE DE JESUS!» (Nate Johnston)
Jeremías 29:11 Porque yo sé los planes que tengo[a] para vosotros» —declara el Señor— «planes de bienestar y no de calamidad, para daros un futuro y una esperanza.
Con amor y oraciones,
