Al día siguiente Yojanán vio a Yahshúa viniendo hacia él, y dijo: «¡Miren, el cordero de Elohim! ¡El que está quitando el pecado del mundo! (Juan 1:29)
Yahshua vino a quitar el pecado del mundo. Te das cuenta de lo que esto significa? Es que Elohim por medio de la Sangre de Yahshua, ha quitado por completo el poder del pecado; para que como creyente nacido de nuevo puedas vivir como si ese pecado nunca hubiera existido.
Entiende esto, el salir de debajo de la sombra del pecado no te garantiza vivir una vida pura.
Puede que tropieces algunas veces y caigas en pecado; pero tienes promesa de Dios que dice que si confiesas tu pecado, El es fiel y justo para perdonarte y limpiarte de toda maldad.
No tienes que vivir ni un instante más bajo la sombra del pecado.
Si de una vez te arrepientes, recibes el perdón de tu Padre Eterno. Cuando Él perdona, olvida. Esto tienes que creerlo por fe para que no te sigas acusando luego de arrepentirte de corazón y pedirle perdón.
Tu aeróbico es nunca más permitir que tus sentimientos de culpabilidad, indignidad y acusación te priven del poder de la Sangre de Yahshua. Arrepiéntete ahora mismo, y sal de debajo de la sombra del pecado. Inmediatamente pides perdón, y tu Padre Omnipotente te perdona, te hace habitar bajo Su Sombra, te cubre y te defiende.