El pastor Luis Reyes, de la Iglesia Jesucristo Fuente de Amor, advirtió sobre los peligros que acechan a las naciones por la sed de justicia que los aqueja.
Recordó que en innumerables versículos la Biblia habla de la palabra “justicia”, donde Dios manda a hacer uso de ella con misericordia.
Hizo un llamado para que se actúe con justicia y que haya equidad, como Dios manda. “En el mesianismo tardío dice Isaías: restauraré tus jueces como al principio, y tus consejeros como eran antes; entonces te llamarán ciudad de justicia, ciudad fiel (Is. 1:26)”.
En ese sentido, entiende que “El hombre está obligado a imitar a Dios actuando con el principio de equidad y con misericordia (Miq. 6:8), y en la consumación final de la historia: justicia y misericordia se identifican. Están vinculadas a la justicia social, la ética, el respeto por la vida humana, respeto por la dignidad de la mujer, el trabajo, el amor al prójimo, el trato digno hacia los animales”, dijo, al indicar que la historia humana Dios actúa a partir de esos dos atributos (justicia y misericordia).
Dios dijo a Moisés: jueces y oficiales pondrás en todas tus ciudades que Jehová tu Dios te dará en tus tribus, los cuales juzgarán al pueblo con justo juicio. No tuerzas el derecho; no hagas acepción de personas, ni tomes soborno; porque el soborno ciega los ojos de los sabios, y pervierte las palabras de los justos. La justicia seguirás, para que vivas y heredes la tierra que Jehová tu Dios te da. (Dt. 16:18-20). Se establecerían tribunales locales en todas sus ciudades. Las sentencias de estos tribunales de primera instancia podían ser apeladas ante el alto tribunal radicado en el santuario principal, cuyo veredicto era definitivo
Recordó que el Señor vino a traer un nuevo Reino cuyo fundamento es el amor, la justicia, la misericordia y la paz. Predicó y enseñó de la justicia del Reino de Dios. En San Mateo proclamó: Más buscad primeramente el Reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas (Mt. 6:33).
El pastor indicó que la justicia del Reino son las leyes, principios y valores que rigen en el Reino de Dios, o Reino de los cielos y que tienen preponderancia con relación a la justicia de los hombres.
Al referirse a lo complejo que resulta establecer justicia en el mundo, reflexiona que no es cosa fácil, por causa de la condición pecaminosa del hombre caído que actúa con injusticia, avaricia y maldad, porque es un títere de satanás; el padre de la mentira.
Caso República Dominicana
Y, citando el caso de República Dominicana, el pastor dijo que cuando la justicia se coloca de espaldas a los reclamos del pueblo arrodillándose para servir a los intereses políticos partidistas, es amenazada la “seguridad jurídica de la nación”.
“Pues entierra con ello la esperanza del país que ha confiado y delegado en los hombres y mujeres que manejan las instituciones del sistema judicial”, dijo el pastor Luis Reyes.
Para él, continuar permitiendo la impunidad en la nación implica que la deuda social siga en aumento, afectando a la clase más vulnerable, olvidada y desposeída, tras indica que esos recursos que deben ser destinados a las políticas sociales para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos se los está llevando la corrupción.
Explicó que lo que vienen sucediendo en los países de América Latina afectados por la corrupción es que “el derecho se retiró y la justicia se puso lejos, porque la verdad tropezó en la plaza, y la equidad no pudo venir y la verdad fue detenida, y el que se apartó del mal fue puesto en prisión (Is. 59:14-15).
“Los cristianos sinceros debemos de luchar activamente para que el poder judicial de República Dominicana y América Latina cumpla con el sagrado deber frente a Dios, el pueblo y las leyes, de impartir justicia de manera transparente, sin tener vacas sagradas, ya que todos somos iguales ante la ley”, enfatiza.